En México, la inflación es un fenómeno recurrente y forma parte de la crisis permanente que el país tiene en su economía, dijo el analista político de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), Paulino Arellanes.
“El Paquete Contra la Inflación y Carestía (PACIC) presentado por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, no tiene la intención disfrazada de imponer tarifas a los bienes y servicios del país, fenómeno conocido como control de precios”.
Para que exista un control de precios, debe intervenir directamente la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), aclarando que no ocurrió así.
Señaló que un control de precios del gobierno mexicano produciría una mayor polarizacion entre la iniciativa privada y el presidente de México.
“Es un control de precios, pero con consenso, es una nueva forma, porque no lo impone Hacienda”.
En entrevista para Intolerancia Diario, el especialista sostuvo que hubo un consenso con diferentes productores e intermediarios del territorio nacional para su elaboración, por lo que descartó una injerencia unilateral de la actual administración federal.
El politólogo, mencionó que el paquete contra la inflación promovido por el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) implica un acuerdo y compromiso con todas las partes involucradas.
Sobre si alcanzará sus objetivos acerca de estabilizar en seis meses el costo de los artículos que conforman la canasta básica, el catedrático respondió que eso dependerá de la voluntad de los productores e intermediarios participantes.
Aunque afirmó que el PACIC plantea metas viables, sugirió que su vigencia se debe prolongar más allá de un semestre y pidió que se realicen alianzas con los intermediarios de los grandes centros comerciales.
"Ciertamente, el programa es el adecuado y de algún modo, establece una alianza con los productores, pero no puede ser solo en seis meses, porque los productores también necesitan insumos”.
A su vez, requieren comprar o importar materias primas para llevar a cabo su producción, por ejemplo, los productores de granos requieren fertilizantes.
Acerca de que no se haya sumado la empresa FEMSA-Coca Cola al plan referido, subrayó que ello obedece a que algunas empresas transnacionales se han “engallado” a raíz de que ellas fueron las que se opusieron a la reforma eléctrica promovida por el mandatario federal.
“A mí me da la impresión más bien que hay una oposición de empresas transnacionales versus gobierno”.
El especialista de la máxima casa de estudios contextualizó que la subida de precios es un fenómeno mundial, aunque precisó que en México es algo que ha venido sucediendo de forma recurrente y forma parte de la crisis permanente que el país tiene en su economía, causando notables efectos sociales.