Todos los ideales ganados por la revolución mexicana que tomó el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y que, después recuperó el Partido de la Revolución Democrática, hoy los representa Morena. A decir del analista político del Instituto de Ciencias Jurídicas (ICI), Cristopher Mejía Rosas, "Morena se volvió el sacrosanto de los acusados porque absorbió a los chapulines y a los tránsfugas políticos".
Además, usaron la plataforma política con el discurso del bienestar social, por eso, algunos grupos del PRI y del PRD se incorporaron a Morena, sobre todos los tecnócratas.
El PRI en sus inicios se definió como un partido con ideales de izquierda, marcado por la recién terminada revolución mexicana. Se asume como heredero del proceso revolucionario y depositario del compromiso por expresar las grandes aspiraciones de la sociedad en programas e instituciones.
"Tiene el cometido de ser vanguardia en la transformación democrática de México, desde una posición ideológica que supone la responsabilidad de interpretar los principios y propósitos de la revolución, en el siglo XXI; es decir, en la definición del Estado y en el programa que se espera impulsar para el gobierno".
Ante eso, Mejía Rosas, dijo que los ideales del nacimiento del PRD ya los absorbió Morena, sobre todo las demandas sociales para la gestión y la competitividad política, “esos sectores giraron a Morena desde que se registró como partido político”.
Recordó que el PRD representaba las aspiraciones de las sociedades en desarrollo que buscan alcanzar un sentido más humano en las relaciones sociales de producción.
"El PRD se estructuró para impulsar un proyecto alternativo de nación al autoritarismo del PRI, porque surgió de una coyuntura trascendental donde se implementó un gran fraude electoral que profundizó la crisis política del sistema que había surgido en 1968 y que lentamente creció a través de los años".
En el caso de Puebla, dijo el analista político del ICI, el PRD se desprendió de todos esos ideales cuando se entregaron al morenovallismo, con la dirigencia de Carlos Martínez Amador.
“Desde la transición de Morena de movimiento social a partido político con reconocimiento de derechos y obligaciones en el escenario electoral, absorbió todas estas bases políticas”.
En ese sentido, explicó que el grupo de los Chuchos del que forma parte Martínez Amador y encabeza Jesús Zambrano ya no forman parte de la base social y popular que dio inicio al PRD.
Finalmente, afirmó que hoy representa intereses empresariales y de un grupo político del morenovallismo que aún queda despierto para el escenario electoral, “ahí apuntala la figura de Mario Riestra por la presidencia municipal y es posible negocie con él y veremos en qué termina”.