Aunque el presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador, ha declarado que tiene bajo control y con blindaje el proceso electoral del 2024, las cosas se le han complicado, sobre todo con las denuncias al interior de las corcholatas, en la figura de Marcelo Ebrard, sobre inequidad dentro del proceso de selección de coordinador nacional de Morena.
A decir del director del Instituto de Ciencias Jurídicas (ICI), Germán Molina Carrillo, el excanciller denunció que existe dispendio de recursos públicos que provienen del gobierno federal y de algunos Estados del país, para favorecer el proyecto de la aspirante Claudia Sheinbaum, por lo que, llamó a sus simpatizantes a denunciar y presentar pruebas, para acreditar esas irregularidades.
Esa denuncia, dijo el analista jurídico, no deben tener nada contento a López Obrador, porque puede representar, previo al cierre de campaña de los aspirantes, una bomba interna dentro de Morena.
Eso, dijo, puede ser el parteaguas para una división, sin descartar la salida de Marcelo Ebrard al no resultar elegido, quien posiblemente busque cobijo en Movimiento Ciudadano y sea factor de visión del voto en los comicios federales del próximo año.
Lo anterior, sin descartar el otro elemento que mueve los planes del presidente, que fue designación de Xóchitl Gálvez como la aspirante del Frente Amplio por México, qué será ratificada el próximo domingo y quien se encuentra a solo 8 puntos debajo de la favorita de Morena, Claudia Sheinbaum, quien lleva más de un año con giras en todo el país.
La suerte de Macelo Ebrard ya está echada, dijo el director del ICI y, a estas alturas del proceso, puede revertir las cosas ante un escenario que no le favorece porque, el presidente no ha intervenido en las campañas, “Ebrard está en la coyuntura de quedar fuera de Morena y en conflicto con el presidente Andrés Manuel, lo que, puede que no suceda”.
Y es que, ante la grave crisis de inseguridad y violencia que se vive en el país, además de la disputa de los cárteles del narcotráfico por el control de los territorios, los secuestros, desapariciones, ejecuciones, corrupción, impunidad, el desplazamiento de la población que huye de las comunidades y las masacres de civiles, ninguna de las corcholatas de López Obrador, han propuestos soluciones, excepto Marcelo Ebrard.
Incluso solo el excanciller, ha alentado a los electores hacia un cambio que pueda beneficiar al país, pero de manera distinta a la política del mandatario mexicano, porque tiene cercanía con todos los grupos políticos, empresariales y de gobierno, así como del extranjero.
Y es que, de lo contrario, no se garantiza la continuidad de la cuarta transformación, sin embargo, al parecer, Marcelo Ebrard tiene perdida la más importantes de las encuestas, que es el apoyo del presidente Andrés Manuel López Obrador, para ser el candidato a sucederlo.