"De unos 40 años a la fecha, líderes focalizados dentro del magisterio poblano encontraron la manera de obtener dividendos con las cuotas personales de cada trabajador y con las aportaciones del Estado poblano", explicó Miguel Guerra Castillo.

En entrevista con Intolerancia Diario, el líder del magisterio disidente explicó que la proliferación de “sindicatitos” les da dividendos a los líderes, porque, aunque son pocos trabajadores que tienen adheridos, reciben cuotas importantes cada quincena,y administran fondos de ahorro y de retiro, así como aportaciones del Estado.

"Las dirigencias de esos sindicatos estatales han manejado grandes cantidades de las aportaciones de los trabajadores de la educación, además de los fondos que manejan y que representan ahorros importantes de los mismos trabajadores del magisterio".

La primera fracción que se separa del magisterio estatal recordó Guerra Castillo, fue el SETEP que logró conjuntar fuerzas ideológicas opositoras a la entonces dirigencia de la Sección 51 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).

"Lo que se generó en el SNTE poblano es que se empezaran a formar “sindicatitos”, de lo que, incluso, en los rubros educativos, hay más de 20 sindicatos estatales, sin embargo, el SNTE no lo cuenta".

Y aunque tienen pocas posibilidades, dijo Guerra Castillo, sus liderazgos logran tener algunas concesiones para conseguir algunas plazas, “pero que no se tome como algo despectivo”.

Por otro lado, afirmó que también pueden conseguir dádivas del gobierno y no luchar por las grandes demandas de la educación en el país y en Puebla no habla bien de esto sindicatos a reserva de conocer mejor sus estatutos.

El vocero del magisterio disidente en el Estado de Puebla aseguró que, esto que nos permite suponer que el nuevo sindicato, como el SETEP, que desde que nació, era evidente que su finalidad era la división.

"En la actualidad, no estamos para dividir al SNTE, que tiene muchas fallas y mucha corrupción, pero es una buena organización de defensa de los intereses laborales de los trabajadores".

Por eso, dijo, aunque son oposición aún siguen adentro por la consigna de la unidad de todo el magisterio nacional y de democratizar los procesos que se viven al interior del sindicato.

Ante eso, destacó que, se debe priorizar al SNTE, por las grandes demandas y la política educativa que traen desde el centro, desde el gobierno federal, toda la normatividad y la legislación vienen del centro.

"Los recursos del magisterio y la política educativa, se administra desde los Estados y esa administración la tienen los gobiernos estatales, pero la política educativa la mandan desde el centro de la República".

Guerra Castillo, recordó que, hubo muchas afectaciones en el acuerdo nacional por la descentralización educativa, sin embargo, el SNTE sigue vivo y en defensa de los trabajadores.

Por lo anterior, desde el CDMP, hace un llamado a los maestros para mantener la unidad del SNTE, pero tienen que democratizarlo y hacerlo más accesible a las mayorías internas.