El tiempo de vida del relleno sanitario de Chiltepeque se cumplió hace cinco años, aunque ahora han ampliado las celdas con la adquisición de terrenos aledaños, pero ya no tiene capacidad para recibir más residuos sólidos.

El profesor de la Facultad de Ingeniería Ambiental y Desarrollo Sustentable de la UPAEP, Francisco Javier Sánchez Ruiz, dijo, “ahorita está viviendo horas extras y lo más que puede soportar porque se han adquirido nuevos espacios de terrenos y hay otros espacios que están entro de las mismas celdas es de medio año”.

En ese sentido, agregó que su "solución" es reabastecer o abrir espacios nuevos, lo que dijo, sólo da "tiempo extra" al problema.

“Lo que genera es que pueden tener tiempo de vida de alrededor de 6 meses por lo máximo y no pueden tenerlo más tiempo sobreviviendo”.

En ese escenario, dijo el académico, ya no es tanto tiempo que se tiene y se tienen que buscar las alternativas, porque el relleno sanitario ya no está dando el abasto suficiente.

“Hay que recordar que el tiempo de vida del relleno sanitario actual ya caducó en función a su diseño a pesar de que se busca diseñar una nueva celda o establecerlas, pero no se ha logrado porque no está clara la política que tiene el gobierno para poder dar el tratamiento a este tipo de residuos, está rebasado”.

El académico UPAEP dijo que, las celdas del relleno sanitario ya están en su capacidad.

"La celda se está saturando y por eso vamos a tener estas montañas de basura y si no se llega a controlar la disposición y lo que vamos a tener es la contaminación de agua, suelo y del aire".

Por otro lado, advirtió que el mal manejo de los residuos sólidos urbanos puede ocasionar grandes afectaciones al ambiente, “el relleno sanitario en su tope limite y a la academia no se han acercado de parte de las autoridades para la búsqueda de nuevas celdas para el relleno sanitario”.

Las tecnologías pueden ser muy caras y no llegan a México, por eso, lo que se propone es generar conciencia entre la población para disminuir este tipo de residuos.

Parte de la empresa Relleno Sanitario (RESA), pueden decir que no tiene el recurso para comprar un terreno y buscar un espacio para colocar un nuevo relleno sanitario, lo que se observa que se están peloteando el problema.

“Como académicos podemos hacer el diseño, el estudio de impacto ambiental y las celdas, pero necesitan acercarse y tener clara la disposición del sector privado y el sector público”, finalizó.