Ninguno de los partidos que integran las dos coaliciones que competirán en el proceso electoral de 2024 para elegir gobernador del Estado de Puebla están a la altura de los perfiles de los dos que serán candidatos al cargo, Alejandro Armenta Mier y Eduardo Rivera Pérez.

Así lo aseguró Cristopher Mejía Rosas, analista político del Instituto de Ciencias Jurídicas (ICI), “los partidos políticos de las alianzas no están a la altura de los dos candidatos”, por eso, será la figura de ambos contendientes los que marquen el derrotero de los comicios.

El candidato de Morena y sus aliados, Alejandro Armenta Mier, y del aspirante Eduardo Rivera Pérez, de la alianza opositora tienen perfiles de mucha trayectoria y de alto nivel por los cargos que han desempeñado en su trayectoria política, por eso, están por arriba de los partidos políticos a los que representarán.

Sin embargo, dijo que, la alianza del partido en el gobierno sí favorece a Alejandro Armenta, “en el caso de Eduardo Rivera no se vislumbran alianzas porque el PAN en el Estado de Puebla, es la cuna de las raíces más conservadoras, las yunquistas del Estado de Puebla”.

La que también tiene fuerzas neoliberales y tecnócratas, que disputan posicionamientos al interior, sin embargo, muchos de ellos no les beneficia la coalición con el PRI-PAN y PRD por la distribución de los puestos.

En ese sentido a la alianza opositora, le será una gran desventaja en la consolidación de alianzas.

Entre la oposición, dijo, encuentra que unirse es una postura un poco completa y arriesgada, donde la ventaja y la bandera la tiene el PAN sin duda, sin embargo, se observa que los posiciona en desventaja para la designación de los cargos.

Por una parte, dijo Mejía Rosas, juega a su favor el hecho de que consolidarse como coalición porque buscan reapuntalar y tener una estrategia meramente electoral.

Sin embargo, por otra parte, no tienen la capacidad de tener consensos al interior de los grupos con más fuerza política en la coalición porque algunos son de perfiles más conservadores y otros más neoliberales, entonces eso afecta la coalición.

El que les genera incertidumbre es Movimiento Ciudadano, al que intentan bajar del escenario político, porque eso es interesante para una correlación de fuerzas de la oposición porque está la disputa entre ver quien va a quedar en el segundo lugar.

Lo más importante, dijo, es que está en disputa el posicionamiento político de quien será la segunda fuerza para después buscar posicionarse en escenarios posteriores al 2024.

“Ese es el problema que tiene la coalición de PRI-PAN-PRD y ahora PSI, entre más miembros, entre más aliados es más difícil controlar y llegar a acuerdos para apuntalar un proyecto”.

En el caso de Morena lo ha logrado en ciertos candidatos y perfiles que cumplen esa capacidad de disciplina por la influencia que tienen en distintos ámbitos políticos.