A través del fenómeno denominado nearshoring, en la actualidad, aproximadamente el 40 por ciento de las empresas consideran reubicar sus cadenas de suministro, con lo que buscan priorizar la proximidad a los mercados de consumo.

A decir de Juan Carlos Botello Osorio, profesor de la Facultad de Comercio y Estrategia Internacional de la UPAEP, en ese escenario, México se posiciona como una opción atractiva, no solo para Estados Unidos, sino también para muchos otros aliados estratégicos.

Entre esos países, señaló, se ubican Japón, Francia, Alemania, Reino Unido, Brasil, India, y otros, que ven en el país latinoamericano una oportunidad para invertir y reconfigurar sus cadenas productivas.

Cabe mencionar que, la relocalización significa trasladar la fabricación a un país cercano o transferir procesos de fabricación a una ubicación geográfica más inmediata, en la que la empresa puede beneficiarse de la cercanía, el horario, la cultura, el idioma, la economía, la política o la historia.

En ese contexto, dijo el académico, destaca la importancia de la especialización de la mano de obra mexicana, fundamentalmente en sectores como el automotriz, que podría adaptarse rápidamente a nuevas actividades.

Sin embargo, señaló que la reconfiguración también requiere inversiones en infraestructura, desarrollo tecnológico y la resolución de problemas como la seguridad y la corrupción.

Además, Botello Osorio destacó la relevancia de la seguridad jurídica y la transparencia para atraer inversiones extranjeras que puede generar mayor desarrollo productivo en el país.

Lo anterior, afirmó, en un contexto de elecciones tanto en México como en Estados Unidos, por eso, subrayó la importancia de garantizar procesos democráticos transparentes para mantener la confianza de los inversores.

profesor de la Facultad de Comercio y Estrategia Internacional de la UPAEP, destacó que, mientras las oportunidades del nearshoring son evidentes, México enfrenta desafíos internos que deben abordarse para aprovechar al máximo este escenario.

La construcción de certeza, transparencia y condiciones favorables para las inversiones extranjeras son clave para consolidar a México como un actor estratégico en la reconfiguración de las cadenas globales de suministro.

y es que, México es un aliado estratégico en la reorganización de las cadenas globales de suministro para los Estados Unidos y para muchos otros países del mundo, pero debe solucionar sus problemas de inseguridad y corrupción que se presentan y prevalecen al interior del país.

El nearshoring representa para México una serie de oportunidades gracias a la reconfiguración de las cadenas de suministro globales, provocada en gran medida por la pandemia de la COVID-19.

Destacó cómo la ruptura de estas cadenas afectó a empresas de todo el mundo, obligándolas a reconsiderar la dispersión geográfica de sus actividades.

El análisis de esta situación llevó a una reconfiguración geopolítica de socios comerciales, especialmente evidente en las tensiones económicas entre Estados Unidos y China.

Esta situación generó oportunidades para países como México, que se presentan como aliados estratégicos en la reorganización de las cadenas globales de suministro.