La Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) se encuentra en el centro de un debate tras la expulsión de "Carolino", un perro mestizo que se había convertido en la mascota no oficial de la Facultad de Filosofía y Letras (FFyL).

La medida, tomada en el marco de un paro estudiantil, ha generado reacciones divididas tanto dentro de la comunidad universitaria como en redes sociales.

Carolino llegó a la facultad hace algunos años y rápidamente ganó el cariño de estudiantes y personal académico. Habitualmente paseaba por los pasillos de la facultad y era visto como parte de la identidad del lugar.

A pesar de no tener dueño oficial, la Dirección de Apoyo y Seguridad Universitaria (DASU) se encargó de su cuidado, proporcionándole atención médica y alimentación.

Sin embargo, la reciente decisión del grupo de estudiantes que mantiene un paro en la facultad ha sorprendido a muchos.

A través de un comunicado publicado en las redes sociales del movimiento, los estudiantes informaron que Carolino había sido retirado de las instalaciones debido a varios incidentes ocurridos durante la protesta.

Según los organizadores del paro, al no contar con personal para garantizar su bienestar y ante varios reportes de mordeduras a estudiantes, decidieron que lo mejor era reubicarlo fuera de las instalaciones.

La decisión ha dividido a la comunidad universitaria. Mientras algunos defienden la medida, señalando que se priorizó la seguridad de los estudiantes, otros la califican de inhumana, considerando que Carolino era un miembro querido de la facultad.

Las redes sociales rápidamente se llenaron de comentarios a favor y en contra, algunos expresando tristeza por la partida del perro, mientras que otros apoyaron la necesidad de cuidar la integridad física de los estudiantes durante el paro.

Ahora, Carolino se encuentra bien y fuera de peligro, personal de DASU confirma que lo tiene resguardado en un edificio de la BUAP. Fueron los estudiantes quienes por seguridad pidieron fuera retirado.