En un acto clave para el movimiento estudiantil, alumnos en paro de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) entregaron de manera formal su pliego petitorio general a la rectora de la institución, María Lilia Cedillo Ramírez.

Durante la reunión, la rectora recibió el documento y estampó su firma como constancia de recepción, marcando un avance en el proceso de diálogo entre ambas partes.

La entrega del documento se realizó en la puerta 3 de Ciudad Universitaria, campus que permanece restringido y al que solo pueden ingresar los estudiantes en paro.

Puntos clave

En el documento presentado por los estudiantes piden: "como voceros del movimiento, queremos respaldar nuestra voz con esta petición".

Los paristas manifestaron su preocupación por su integridad física, académica y familiar, exigiendo garantías institucionales para la protección de sus derechos universitarios.

"Ante la posibilidad de una violación a nuestros derechos, emplazamos a las autoridades académicas, a los organismos de derechos humanos locales, nacionales y a la sociedad en general, a visibilizar nuestra situación para prevenir cualquier vulneración de nuestros derechos universitarios", señala el pliego petitorio.

El documento, respaldado por los voceros de las diversas facultades, fue entregado en virtud de lo dispuesto en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y la Ley de la Comisión Nacional de Derechos Humanos.

Los estudiantes manifestaron su preocupación por su integridad física, académica y familiar, exigiendo garantías institucionales para la protección de sus derechos universitarios

Entre las principales demandas presentadas destacan:

Reconocimiento oficial de la comisión de voceros como representantes legítimos de la comunidad estudiantil, con la facultad de actuar como interlocutores directos con las autoridades universitarias.

"Nuestra comisión, que en una etapa posterior se establecerá como comisión permanente, tendrá la responsabilidad de dar seguimiento a las problemáticas que surjan tanto a nivel de facultad como en el ámbito universitario en general", indica el documento.

Señalan a la comisión de voceros como representantes legítimos de la comunidad estudiantil, con la facultad de actuar como interlocutores directos con las autoridades universitarias.

Además piden un compromiso institucional de no represalias por parte de las autoridades, directivos y personal administrativo contra los alumnos que participan en el movimiento.

"Se exige el compromiso institucional de la rectora, doctora María Lilia Cedillo Ramírez, así como de los respectivos directores de cada facultad y personal administrativo, de que no se llevarán a cabo acciones de acoso ni represalias contra los estudiantes participantes en el movimiento", leyeron.

Piden la creación de una comisión permanente que dé seguimiento a las problemáticas estudiantiles y sirva como enlace entre la comunidad y las autoridades.

Además del documento principal, los voceros anexaron un listado con nombres, matrículas, licenciaturas y firmas de cada representante estudiantil, lo que refuerza la formalidad de la petición.

Tras la entrega del pliego petitorio, el vicerrector de Docencia, Jaime Vázquez López, destacó que aún se desconoce cuándo se reanudarán actividades en la BUAP, pero esperarán la respuesta al diálogo por parte de los estudiantes.

El vicerrector enfatizó que no se tiene establecido un tiempo para culminar las pláticas, pero que seguirán desahogando las mesas de trabajo, siendo muy respetuosos en la construcción de las soluciones.

La firma de recepción por parte de la rectora Cedillo es vista por los estudiantes como un primer paso para el reconocimiento de su movimiento y la apertura al diálogo.

No obstante, los alumnos han reiterado que se mantendrán atentos a la respuesta de las autoridades y a las acciones que deriven de esta negociación.

El movimiento

El paro estudiantil en la BUAP surgió como una respuesta a diversas problemáticas dentro de la institución, incluyendo presuntos casos de acoso, deficiencias en infraestructura y la necesidad de mayor participación estudiantil en la toma de decisiones.

Con el objetivo de exigir soluciones concretas y establecer un canal de comunicación con las autoridades, los voceros de diferentes facultades conformaron una comisión representativa que se encargó de redactar y presentar el pliego petitorio.