Está en pleno apogeo la venta de la sidra en Huejotzingo, donde existen 25 casas productores, que por la temporada navideña llegan a comercializar hasta 10 mil cajas de sidra cada una.
Gracias a estas ventas se llegan a generar hasta mil 500 empleos, por lo que invitan los productores a seguir consumiendo productos poblanos.
Desde el pasado 30 de noviembre el municipio de Huejotzingo realiza la tercera edición de la Feria Navideña de la Sidra y Artesanías, que concluirá hasta el 31 de diciembre.
En este evento esperan obtener una derrama económica superior a los 10 millones de pesos.
El mismo cumple su tercer año de realización, en el que 15 productores de sidra y alrededor de 30 artesanos no sólo de la región de Huejotzingo, sino también de pueblos mágicos como Chignahuapan, Pahuatlán, Tlatlauquitepec y Cholula.
La tercera Feria Navideña de la Sidra y Artesanías se realiza en la explanada municipal, sin cobro de admisión, por lo que los organizadores esperan recibir la afluencia de más de 10 mil visitantes.
El regidor de Turismo, José Rafael Hernández Paredes, precisó que tienen la participación de 15 productores de sidra que expondrán las variedades de su bebida como la rosada, natural y de pera, así como 30 artesanos.
Informó que por parte de Pahuatlán se ofertarán artículos como chaquira y papel amate, Chignahuapan ofrecerá sus tradicionales esferas, Tlatlauquitepec mostrará vinos y licores.
Cholula distribuirá artesanías de madera y barro, mientras que la región de Huejotzingo y Calpan destacará por sus coronas de bellotas así como por los venaditos y cestos de vara.
Mencionó en este evento los precios de los productos serán directamente de fabricante puesto que no se contará con intermediarios; esta situación beneficia de forma directa a los productores por distribuir sus propios artículos y a los clientes por conseguir el mejor costo.
Además, hay degustación de sidras, vinos y licores, con lo que los consumidores podrán apreciar sus sabores y así escoger sus favoritos.
Señaló que la temporada de diciembre es cuando más se consume el producto, por lo que con el apoyo del ayuntamiento los productores han conseguido posicionar al municipio como el primer fabricante de sidra a nivel nacional.
Para incentivar al turismo para asistir a esta feria, agregó que al visitar Huejotzingo podrán aprovechar de la senda turística, recorridos al parque de San Diego, la zona de los volcanes, que en época invernal ofrece paisajes nevados, y el convento más antiguo de América Latina, entre otros.
Productores de sidra de la zona de Huejotzingo alertaron sobre productos chinos o “pirata” de la bebida que empiezan a comercializarse en la región, los que son de muy mala calidad y dan una competencia desleal.
Hernández Paredes señaló que es fácil detectar estas sidras de mala calidad, ya que “pica” la lengua por los químicos que contiene.
“Nuestras sidras son un producto natural, casi se trata de jugo de manzana o pera, el que se comercializa, además de que los productos chinos son muy baratos”, indicó al señalar el precio.
La bebida
La sidra es una bebida de baja graduación alcohólica (desde menos de 3 hasta máximo de 8 por ciento) fabricada con el zumo de la manzana.
Su nombre viene del griego sikera que pasado al latín se nombra sicera, lo que significa “bebida embriagadora”, calificativo atribuido también a la palabra francesa cidre y la inglesa cider.
La mayoría de los historiadores coinciden en que la sidra se originó en los años anteriores a Cristo. Parece ser que a las civilizaciones de Egipto y Bizancio, y más tarde a las griegas.
Los romanos que consumían vino se dieron cuenta de la sidra al conocerla en las tierras que conquistaron; ellos, sin embargo, la llegaron a emplear con fines curativos.
Otros investigadores creen que el origen de la sidra está en una bebida que los celtas extraían de las manzanas. Según estos autores, fue dicha civilización quien dio a conocer esta bebida por toda Europa, sin embargo, fueron los árabes quienes mediante avanzados sistemas agrarios extendieron las clases de manzanas y las técnicas para su producción por todo el continente.
Cuando los europeos conquistaron América llevaron consigo las técnicas de cultivo de manzanas y elaboración de sidra. Para el año 1629 los manzanos estaban completamente implantados en las colonias de Virginia y Massachusetts.
Las manzanas que estos árboles daban no eran dulces ni acuosas y por esa razón fueron destinadas a la elaboración de sidra.
En Estados Unidos a la sidra fermentada se le llama hard cider para distinguirla del mosto de manzana sin fermentar, que a veces es es llamado cider, una bebida que tenía una buena imagen y frecuentemente consumida en celebraciones de todo tipo (reuniones familiares, celebraciones entre amigos, etcétera).
En México, la sidra se produce en las ciudades de Huejotzingo y Zacatlán de las Manzanas, en el estado de Puebla. A diferencia de la sidra española, tiene un sabor más dulce y su consumo aumenta en la época decembrina para el brindis de Navidad y Año Nuevo.
Beneficios a la salud
Una serie de investigaciones ha probado que la sidra muestra altos niveles de antioxidantes; tan sólo una copa de esta espumosa bebida contiene la misma cantidad de antioxidantes que una copa de vino tinto, con la diferencia de menos alcohol.
Esas propiedades antioxidantes ayudan a proteger contra enfermedades como el cáncer y cardiovasculares; también se le considera eficaz en combatir el colesterol, por su contenido en aminoácidos alto y variado.
Asimismo, la presencia de antioxidantes como el antociano actúa como un regulador del ácido úrico, por su parte el ácido málico contenido en la bebida es un diurético poderoso que activa la función de los riñones y evita la acumulación de ácido úrico, por lo que queda demostrado que los bebedores de sidra están menos expuestos a dolencias como “la gota” y piedras renales.
Si a esto le sumamos los principios activos, minerales, vitaminas, su contenido en fósforo, calcio y potasio de la manzana que ayudan a mantener en niveles óptimos la presión sanguínea, la sidra se considera una mejor opción a los licores u otras bebidas de alta graduación.
En cuanto a su volumen de alcohol, aunque es bajo éste contiene taninos (polifelones) que dan a la bebida un poder bactericida. Las sustancias péptidas que contribuyen al espalme de la sidra tienen propiedades dietéticas y organolépticas que sirven para regular otras funciones intestinales.
Las enzimas digestivas que contiene tienen efectos en la regulación intestinal, absorción del agua, efectos laxantes, equilibrio de la flora e incluso puede tener efectos preventivos del cáncer de colon.
A las personas que desean adelgazar sin prescindir del alcohol podrían tomar sidra por su bajo contenido calórico.
Así pues, tanto por su bajo contenido de alcohol como por los beneficios que aporta a la salud las frutas con las que se elabora, la sidra como otras bebidas fermentadas ha sido incorporada a la pirámide alimentaria de algunos países europeos.
Las cantidades que se pueden considerar moderadas se encuentra entre medio litro y una botella, según los expertos.
Tanto por su bajo contenido de alcohol como por los beneficios que aporta a la salud las frutas con las que se elabora la sidra, como otras bebidas fermentadas, ha sido incorporada a la pirámide alimentaria de algunos países europeos.
Las cantidades que se pueden considerar moderadas se encuentran entre medio litro y una botella, según los expertos.
La sidra es una bebida de baja graduación alcohólica (desde menos de 3 hasta un máximo de 8%) fabricada con el zumo de la manzana.