Los groupies del conocimiento, ideastas del desterritorializado mundo de la Ciudad de las Ideas encontraron en personajes como José Miguel Sokolof, especialista en temas de comunicación ergo publicista; o el físico teórico, Lawrence Kraus, que presentó quizás sin la advertencia del público, una versión postmecanicista del universo donde los significados están ausentes – vaya premonición nihilista- y en el humorista terapeútico, Patch Adams, inmortalizado por el extinto, Robin Williams, la recepción del auditorio ya por la tarde con sus narices rojas, fetiches de una higiene del humor, momentos memorables.  

El registro lúdico del festival se combinó con las cápsulas de conocimiento, la mayoría de las veces, desterritorializado, que volvieron al auditorio, al inicio del acto, magro, y cuya visibilidad de lugares vacíos despreocupó a los organizadores, embebidos en el monstruo mediático de la seducción del conocimiento en el festival que se ha vuelto emblemático en Puebla desde los tiempos de Mario Marín, cuando se inició y que el gobierno de su antagonista, Rafael Moreno Valle, ha consolidado como alter ego del status tecnocrático. 

Con el slogan “Whats the point?”, anglicismo intraducible por su connotación desafiante, Andrea Roemer, cónsul de México en San Francisco, cuyas vacaciones coinciden, otra coincidencia quasi cuántica muy afortunada, con la presentación del festival del conocimiento dosificado presentó en la inauguración el festival. 

Los afortunados ideastas que asistieron al festival de las ideas registraron entre sus gadgets, otra fetichización postgutemberiana, los libros de Gas Saad y Jason Padget, que se podían encontrar en el nutrido foyer del auditorio metropolitano, víctima de la arquitectura sexenal modernizadora, y que firmaron los autores entre sus nuevos groupies. Saad defendió la tesis apreciada por el capitalismo de que cuán biológico es el impulso de consumir, enunciado que de inmediato suscitó el entusiasmo de los ideastas.

Aunque las advertencias sobre la equidad y el progreso, relación siempre en tensión, fueron enjuiciadas sucintamente por Andrew Bastawrous, ganador del Gifted Citizen 2014, quien recordó que existen sitios donde la gente tienen más acceso a los dispositivos móviles celulares que al agua. 

La explanada del auditorio metropolitano, sede del festival de las mentes brillantes, reunió las carpas donde patrocinadores presentaban sus productos. 

Aunque también el foro halló en las personalidades del activismo como Trisha Pabru, fundadora de Rethink Words, quien criticó el cyberbullyng. La joven de 15 años cautivó al publicó de la ciudad de las Ideas con sus propuestas innovadoras y su concepción social de la tecnología y la industria de la información.

Pero más allá de las aportaciones progresistas, en medio de espectáculos como las interpretaciones del tenor, Mario Rojas, que estremecieron al público, o de la pianista, Daniela Liebman, la ciudad de las Ideas le sirvió al gobernador de Puebla, como plataforma para promover el evento y a Puebla, eufemismo de la autopromoción mediática en el noticiario de horario estelar de Tv Azteca, entrevistado por Javier Alatorre.

Kraus acuñó, quizás como si se tratara de un aforismo atómico que en términos físicos sólo somos un accidente cósmico, revelación de su propia interpretación de la ciencia, que lejos de provocar alguna suerte de terror metafísico o mea culpa existencia, entre los ideastas, generó los típicos retuits de la benevolencia del auditorio seducido por el físico teórico que pasó de la especialización de su campo a los best sellers del mundo mainstream. 

El festival mostró, como en años previos, su afán seductor que combina la participación de los ideastas y su anhelo wannabe de incorporar nuevas ideas, sin remitirse a la bibliografía especializada de los conferencistas. 

Por la mañana, se realizó, en un auditorio con visibles huecos, la ceremonia inaugural, con la pompa habitual donde Roemer y el gobernador de Puebla, tomaron el micrófono.
El cónsul de México en San Francisco, Andrés Roemer no faltó a las cortesías políticas del gobernador, ni a los recursos que año con año destina -entre 31 y 36 mdp, cifras periodísticas el gobierno de Puebla al festival- y agradeció al gobernador del estado “la transformación que ha hecho de Puebla”.

Roemer, ya en su papel de promotor de las actividades del gobernador, dijo que 25 mil personas han asistido a los distintos festivales de Ciudad de las Ideas con la participación de 393 “mentes brillantes”, es decir, conferencistas.

El gobernador de Puebla, aprovechó el foro para apapachar al dueño de Tv Azteca: “Hemos buscado junto con nuestro amigo, Ricardo Salinas, creador de este gran concepto y Andrés Romer muchas de las reflexiones que nos hacemos en privado las podamos compartir en público con algunas de las mentes brillantes. Me da mucho gusto que esta edición se lleve a cabo en la nueva casa de la ciudad de las Ideas”.

Moreno Valle, quién ordenó la remodelación del auditorio siglo XXI construido por el arquitecto Pedro Ramírez Vázquez, hasta volverlo casi irreconocible, afirmó que el auditorio metropolitano es un lugar idóneo para llevar a cabo un evento de esta trascendencia.

El gobernador, aunque jamás ha enviado una iniciativa sobre el tema de despenalización de la marihuana al Congreso del Estado ni ha convocado a especialistas en la materia para que se discuta el tema, justificó la existencia del Festival de Mentes Brillantes como un lugar para discutir temas de salud pública y derechos humanos: “Al mismo tiempo buscamos que en el programa hubiera espacios de debate de temas de actualidad pocos podrían ser más interesantes, que el que se va a llevar a cabo el sábado sobre la legalización de la droga donde participarán expresidentes de México, de Colombia, de Suiza y de manera  destacada la participación de Ricardo Salinas, el sábado vamos a cerrar con broche de oro, porque son temas que están hoy en la agenda nacional. Todos los medios tienen en su portada estos temas hace falta poder discutirlo con información, con opiniones diversas en un nivel alto de debate como cada año espero que se cumpla el objetivo que nos trazamos todos los que participamos en la ciudad de las ideas y es que esta visión sea mejor que la del año pasado”

“Bienvenidos a Puebla”, culminó el gobernador, su participación en la ceremonia inaugural.