Luego de que el gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta diera a conocer irregularidades de la Red Urbana de Transporte Articulado mejor conocido como RUTA, se sabe que fueron denunciadas desde hace ocho años, sin que las autoridades morenovallistas hubieran hecho algo para frenar la corrupción. Actualmente, el servicio en la línea 1 es escaso, la principal estación llamada Juárez Serdán se encuentra en mal estado y las escaleras eléctricas sin funcionar.

De acuerdo a la Ley del Transporte, el Sistema Ruta es operado por Carreteras de Cuota de Puebla, a pesar de que correspondería a la Secretaría de Movilidad y Transporte, lo que ha generado la improvisación en la operación en todo el sistema, incluidas las alimentadoras.

El proyecto del metrobús, fue una de las promesas del morenovallismo, con la planeación de al menos tres líneas, sin embargo, sólo entregó dos que enfrentan serios problemas sobre todo en las horas pico, sin que la empresa ADO que tiene la concesión de la línea 2, haya dispuesto de más unidades.

De acuerdo con investigaciones dadas a conocer por Intolerancia Diario, a partir de que comenzó a ejecutarse el proyecto en 2011, fueron las dos primeras líneas, donde prevaleció la opacidad y mal servicio.

Las irregularidades

El 29 de enero de 2013 se dieron a conocer estudios realizados por las organización Observatorio Urbano Metropolitano de Puebla y la asociación civil y El Poder del Consumidor indicaban que el servicio de la Red Urbana de Transporte Articulado estaba reprobado en materia de seguridad, tanto para peatones como con una deficiencia en las instalaciones eléctricas, además de que se carece de señalética, esto en la línea 1.

A través de un comunicado enviado por Francisco Vélez Pliego, coordinador del Observatorio,  el documento enviado precisaba que entre los aspectos más preocupantes que se encontraron durante la revisión es  la inexistencia de semáforos peatonales, problemática que se identificó en todas las intersecciones y cruces peatonales a lo largo de los 18.5 kilómetros del corredor.

“Esto significa que, en las 38 estaciones de plataforma alta y en las 2 terminales, los usuarios carecen de condiciones de seguridad básicas para ingresar al sistema de transporte. Si bien todas las estaciones están ubicadas en cruceros que cuentan con semáforos para los automotores, la ausencia de un semáforo peatonal propicia que los usuarios intenten atravesar en cualquier momento una vialidad donde los vehículos circulan a una velocidad promedio de 50-60 kilómetros por hora. A esto se suma la ausencia de policías de tránsito y ciclos semafóricos sincronizados y monitoreados”.

Daniel Zamudio, ingeniero en transporte e integrante de El Poder del Consumidor, explicó en el documento: “En la evaluación técnica del trayecto, desde Chachapa hasta Tlaxcalancingo, encontramos obras inconclusas, ausencia de medidas de seguridad indispensables y errores de instrumentación que en conjunto colocan a este servicio muy por debajo del estándar de calidad de los sistemas de autobuses rápidos (BRT, Bus Rapid Transit)”.

“Por ejemplo, todas las estaciones carecen de señalética (sistemas de mapas y rutas), sistema Braille, baños, sistemas de información visual o de voz. Asimismo, la instalación de torniquetes y  máquinas para la venta y recarga de tarjetas avanza con lentitud.”

Asimismo, Daniel Zamudio insiste en la falta de seguridad:  “Al interior de las estaciones hay cables expuestos de instalaciones eléctricas incompletas (torniquetes, lectores de tarjetas), lo que representa un riesgo para los usuarios".

Las  organizaciones en el desglose de las deficiencias indicaron: "En las terminales (Chachapa  y Tlaxcalancingo), el techado no cubre todo el andén por lo que los usuarios que esperan para abordar los autobuses estarán expuestos a las condiciones climáticas extremas, aunque se encuentren dentro de la estación".

Promesa incumplida

En la puesta en circulación de la línea 1 sólo hubo 5 autobuses articulados y de 22 autobuses convencionales.

“Si bien hoy se afirma que serán 119 autobuses, no se había cumplido el anuncio oficial de que este sistema contaría con 45 articulados. La consecuencia inmediata es la saturación en las unidades a niveles muy cercanos al colapso,  incluso en horarios que no son de máxima demanda, lo cual anula las condiciones de seguridad, integridad personal y confort de los usuarios, además de afectar sus tiempos de traslado”, señalaron los especialistas.

El tiempo promedio de espera para abordar una unidad en la terminal (Cachapa o Tlaxcalancingo) fue de 25 minutos, mientras que en las estaciones fue de 15 a 30 minutos, debido a la baja frecuencia de paso de los autobuses y a la saturación de los mismos. "Estos tiempos de espera reflejan que las unidades son insuficientes y que el centro de control de operaciones está operando en forma deficiente. (En ocho de las once líneas de BRT que operan en el país, en hora de máxima demanda, cada autobús tarda menos de 3 minutos en pasar", indicó el estudio.

La denuncia

En julio de 2013 se presentó un exhorto en el Congreso del Estado, para investigar los hechos, pero fue enviado a la congeladora.

PRIMERO.- Se exhorta al Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos S.N.C., a que en el ámbito de su competencia realice una investigación para verificar la calidad, los tiempos de ejecución del proyecto y la inversión realizada para la implementación del primer corredor vial del Sistema de Transporte Metrobús en el Estado de Puebla.

SEGUNDO.- Se exhorta a la Auditoria Superior de la Federación a que realice una auditoría, respecto a los recursos federales erogados para la construcción y adaptación del  primer corredor vial del Sistema de Transporte Metrobús en el Estado de Puebla.

TERCERO.- Se exhorta a la Auditoria Superior del Estado a que realice una auditoría, respecto a los recursos estatales erogados para la construcción y adaptación del  primer corredor vial del Sistema de Transporte Metrobús en el Estado de Puebla.

El engaño

De acuerdo con el documento entregado por el Gobierno del Estado al Fondo Nacional de Infraestructura del Gobierno Federal, operado por BANOBRAS, mismo que sirvió para justificar la construcción e implementación del metrobús, se tenía estimada la prestación del servicio para 107 mil 758 usuarios por día, lo cual se ha incumplido a la fecha, ya que se tiene un promedio diario de 35 mil 347 usuarios, es decir, menos del 35% de lo justificado.

Asimismo puntualizó sobre las irregularidades:

El  pago en efectivo en rutas alimentadoras. Regresando con ello al esquema original de hombre-camión y a tener una evasión de más de 30% de los ingresos. Cuando un sistema de prepago garantiza el 100% de la recaudación.

·  Implementó del  cobro mixto (efectivo y tarjeta).

·  Establecimiento de rutas alimentadoras auxiliares con autobuses de más de 6 años de antigüedad, cuando el compromiso era tener una flota vehicular nueva. Estos autobuses no pertenecen al sistema RUTA y han sido revestidos con su cromática.

· La errónea planeación de las rutas alimentadoras paralelas al Metrobús (BRT), con un pasaje más económico que el de RUTA. Disminuyendo con ello el uso del BRT

Fraude cantado

El pasado viernes 31 de agosto  de 2012, Intolerancia Diario a través de la columna Contracara, de Enrique Núñez, puso al descubierto qué se prestaría con autobuses el servicio de metrobús:

“Más allá de todos los conflictos operativos que provocará el metrobús, este columnista tiene información privilegiada que apunta a que detrás de este sistema de transporte se prepara un fraude de grandes magnitudes.

Una fuente del interior de la ST, reveló a este columnista que la operación del metrobús (RUTA) no se hará con unidades articuladas, como se había planteado al momento en que se hizo el proyecto.

Para dar el banderazo de arranque, sólo habría dos unidades articuladas —para justificar el proyecto original—, pero el resto de las unidades serán camiones comunes y corrientes, similares a los que hoy circulan por la ciudad.

Pero lo más grave de este caso es que —de acuerdo con la información recibida por Intolerancia Diario— sin existir una licitación de por medio, desde hace unas semanas se fabrican en la planta de camiones de Mercedes Benz las unidades, pese a que originalmente se había planteado que serían 45 autobuses articulados con capacidad para 150 personas.