Un total desastre resultó el primer día de vacunación contra coronavirus en la capital del estado de Puebla, donde cientos de personas mayores de 60 años de edad se quedaron sin la protección.

Desde la tarde de este lunes, empezó la desesperación de las personas que llevaban entre 6 y 10 horas en las filas  en el único punto de vacunación en la ciudad.

A gritos exigían que los vacunaran, luego de la larga espera y falta de información, los cuales llegaron a ser tan álgidos, que tuvieron que llegar elementos de la Policía Municipal a poner calma.

 

 

La sana distancia nunca se guardó en el lugar donde las personas mayores iban protegidos con cubrebocas y hasta caretas. Los tumultos se intensificaron conforme avanzó el día y se agudizaron cuando cayó la noche.

Las personas se tenían que sentar pegados hombro con hombro en las banquetas o bancos que llevaron por sí mismo, incluso hubo algunos casos de insolación.

“¡Llevo ocho horas con mi papá y allá lo tengo formado, si se me desmaya quién me lo atiende!” gritó una mujer madura al guardia de seguridad,  que trataba de calmarlos.

“Mis defensas están bajas, estoy mala de mis plaquetas y estoy esperando desde las diez de la mañana”, dijo una mujer mayor de 80 años de edad, sentada en la banqueta por el cansancio.

“Ya nos empieza a arder la garganta, primero el calorón, luego el frío, vamos a acabar enfermos”, dijo la mujer cubierta con su careta y cubrebocas N95.

Desde el viernes pasado, supuestamente con el objetivo de garantizar las medidas de sana distancia en la jornada de vacunación, residentes en las colonias del listado oficial en la ciudad de Puebla, se realizó el registro y asignación de turnos de manera digital, para aplicar 76 mil dosis.

Hasta el momento, el delegado de la Secretaría del Bienestar en Puebla, Rodrigo Abdala, no ha emitido información alguna del caos.