Anteel panorama violento que arropa a México, a partir del comienzo de la Cuaresma con el Miércoles de Ceniza, el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, anunció que el primer miércoles de marzo pedirá por la paz de Ucrania.

En la misa de este domingo, el arzobispo señaló que con el signo penitencial de la ceniza, empieza el tiempo cuaresmal que en está ocasión se dedicará a la oración para que regrese la paz a los seres humanos "que hoy más que nunca se empeñan en autodestruirse con un lamentable desprecio a la vida".

“Además nuestro querido Papa Francisco nos acaba de pedir, que ante el empeoramiento de la situación de guerra que se vive en Ucrania que este miércoles de ceniza, sea una jornada intensa de oración y de ayuno por la paz".

Refrendó que el Papa Francisco invita a todos los humanos a unirse a esta intención y, además, que toda la Iglesia Universal ofrezca esta jornada por la paz en el mundo y para el pueblo nacional por la paz al seno de México en donde priva la violencia extrema.

Desde la Basílica Catedral Metropolitana, Sánchez Espinosa puntualizó que las expresiones del corazón perverso del ser humano se traducen en guerras bizantinas como la que se está viviendo entre Rusia y Ucrania; además de la violencia extrema que se vive en México.

“Si el hombre se llena de orgullo y soberbia, por eso rencores; las venganzas y las guerras como la que tiene escenario en Ucrania o en nuestro país, la criminalidad. Esas son expresiones de un corazón perverso". 

Subrayó que el corazón bueno trabaja por la reconciliación, lucha por la justicia, la paz, el perdón porque el corazón bueno únicamente construye la paz.

Bajo ese panorama reprobó que se esté presentando un incremento incontrolable de casos de violencia, criminalidad e injusticia al seno de México en medio de los efectos de la pandemia del Covid-19.

“Ahora estamos viviendo, tristemente, esta situación de discordia, de rencor, de venganza, de guerra, de muerte, de criminalidad, de injusticia, de desprecio a la vida. Esas son expresiones del corazón perverso; el corazón bueno no actúa así”.