El equipo de transición del gobierno electo del estado, que encabeza Rafael Moreno Valle, gestiona una carpeta de inversión para ser presentada a directivos de la empresa Mazda Motors, con la finalidad de atraer su inversión cercana a los 470 millones de dólares en la construcción de una planta armadora de autos.
Así lo dio a conocer el representante del equipo de transición en materia económica, Pablo Rodríguez Regordosa, al reunirse con un grupo de constructores afiliados a la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) delegación Puebla.
Durante el evento, Rodríguez Regordosa anunció las pretensiones del gobernador electo para atraer la inversión que en fechas recientes dio a conocer la firma japonesa Mazda Motors, que busca en este año invertir entre 355 y 475 millones de dólares en la construcción de una planta de ensamblaje de autos en México.
De acuerdo con el representante de equipo de transición, el gobierno entrante gestiona una carpeta de inversión que promueva la infraestructura de Puebla en el sector automotriz y autopartes, considerando el impacto económico que ha generado la firma alemana Volkswagen.
Aunque destacó el crecimiento de la industria poblana, aseveró que existe una grave carencia en la clusterización, debido a la desarticulación que muestra la proveeduría poblana al encontrarse muy separada de sus socios y clientes, hecho que incide en el incremento de los costos finales.
El plan de inversión estima el arranque de operaciones en el año 2013 con un ritmo de producción de 100 mil unidades anuales.
De consolidar el proyecto en México, será la primera vez que la automotriz japonesa conserve el control de una planta en el exterior, además de consolidar a la ensambladora como la cuarta base de producción en operaciones después de las establecidas en Estados Unidos, China y Tailandia.
Habrá que destacar que desde 1998 Mazda no invierte en una empresa fuera de Japón, por lo que sería la primera planta ensambladora fuera de la nación asiática, después de abrir hace 12 años una en Tailandia, junto con Ford.
Cabe señalar que fue en noviembre pasado cuando la empresa japonesa Mazda Motors y la correduría Sumitomo Corp. anunciaron la inversión de 40 mil millones de yenes en la construcción una planta armadora de autos en México que permita abastecer a América Latina.
Van tras los emergentes
Según el comunicado emitido por un portavoz de la firma Mazda, la automotora evalúa opciones en mercados emergentes, aunque afirmó que el plan de inversión esta en desarrollo.
Adelantó que con este proyecto la empresa busca conservar la participación mayoritaria en la empresa conjunta que opere la planta ‚Äîdedicada al armado de autos compactos, como los modelos Demio y Axela‚Äî.
