Con motivo del Día de Muertos, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) recomendó reflexionar y considerar la contratación de algún plan de seguro de vida.

Refiere que la celebración del Día de Muertos es parte de una intensa tradición cultural en México, aunque el conjunto de aspectos asociados con la muerte de un ser humano puede verse agravado por el impacto monetario o patrimonial que implica un deceso.

Por ello, el organismo recomienda considerar la contratación de algún plan de seguro de vida de entre las muy diversas opciones de seguros que existen en el país, donde el costo de una prima puede ser accesible.

Precisa que la clasificación de los tipos de seguro puede ser desde microseguros, que son los de bajo costo y cobertura limitada, y van desde 267 pesos anuales (mujer) o 375 pesos anuales (hombre), por una suma asegurada desde 100 mil pesos hasta la cantidad superior que se desee asegurar.

No obstante, aclara el organismo, el respaldo de los microseguros puede implicar una diferencia sustancial (en términos económicos) para los descendientes, en caso de un deceso inesperado.

En general, abunda, el seguro de vida es uno de los tipos de seguro en el que, el pago por parte de la compañía de seguros de la suma asegurada del contrato depende del fallecimiento o sobrevivencia del asegurado en un momento determinado.

Entre las modalidades tradicionales de seguro, la Condusef menciona el seguro en caso de sobrevivencia, con el cual el beneficiario (generalmente el propio asegurado) percibirá la suma asegurada si vive hasta la fecha predeterminada y garantiza el pago de un capital o una renta al beneficiario.

También da a conocer que está el seguro en caso de fallecimiento, con el cual el beneficiario (que puede ser una o varias personas) recibirá la suma asegurada estipulada cuando se produzca el fallecimiento natural o accidental del contratante.

Esta es una clase de seguro de vida, ya sea que se trate de un capital o de una renta, se pagará por la compañía de seguros al beneficiario (que puede ser una o varias personas), si se produce la muerte del asegurado, detalla.

Indica que la otra opción es el seguro dotal mixto, modalidad especial que se integra por un seguro de riesgo y un seguro de ahorro, con lo cual, si el asegurado fallece antes del plazo previsto, se entregará a sus beneficiarios la indemnización estipulada, y si sobrevive a dicho plazo se entregará al propio asegurado la suma asegurada establecida por el contrato.

Para contratar algún plan de seguro, la Condusef recomienda contacta a un asesor profesional de seguros certificado por la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas (CNSF) y comparar entre las diferentes opciones que hay al alcance.

Según datos de la CNSF, al cierre de junio de este año, 55 compañías operaron seguros de vida, mientras que 79 empresas ompañías operaron seguros de no-vida.

Sin embargo prevalece una fuerte concentración entre las compañías que ofrecen seguros de vida, en la medida en que solo cinco empresas concentran 66.4 por ciento del mercado (MetLife, GNP, BBVA Bancomer, Monterrey y Banamex).

En caso de deudas contraídas con diversas entidades financieras, la Condusef sugiere verificar que el plan de crédito contratado tenga asociado un seguro de vida que cuando menos liquide el saldo de las deudas al momento de morir.

Asimismo, sugiere elegir un plan de seguro acorde con las necesidades del asegurado, revisar continuamente la correcta designación de tus beneficiarios y actualizar los datos de contacto registrados, además de hacer un testamento para evitar conflictos a los descendientes.