El sector laboral mexicano terminará 2012 con buenas cuentas, pese al entorno de incertidumbre y volatilidad en los mercados financieros, afirmó el secretario del Trabajo, Javier Lozano, quien calificó de imperdonable no aprobar la reforma laboral.

Tras la colocación de certificados bursátiles por parte del Infonacot, el funcionario federal dijo que al cierre de noviembre pasado se registraron 815 mil 313 nuevos empleos formales en el país, aunque por cuestiones de estacionalidad, para la segunda quincena de diciembre se esperan recortes.

Expuso que para 2012, si el crecimiento de la economía es de 3.5 a 4.0 por ciento, andaremos en niveles más o menos iguales en generación de empleo, de 550 mil a 600 mil empleos, que “no son despreciables en condiciones de un contexto global como el que estamos enfrentando”.

Refirió que aunque la tasa de desocupación bajó 5.0 por ciento a octubre, por debajo del 8.2 por ciento de los países de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), aún no se recupera el nivel previo a la crisis de 2008.

Admitió que debido a que se tiene un crecimiento insuficiente de empleos, de informalidad, escasa productividad en muchos sectores, “es imperdonable que en el Congreso de la Unión (...) se sigan negando a aprobar las reformas estructurales que necesita nuestro país en materia económica y señaladamente la reforma laboral”.

Es reprobable, sostuvo, que teniendo instrumentos poderosos para poder aliviar la situación, contribuir a la mejora de la eficiencia del mercado laboral en México y darle más competitividad a la economía, no se den los cambios necesarios.

Javier Lozano reprobó que por un cálculo político, por una coyuntura política electoral, se le niegue a los mexicanos, sobre todo a los jóvenes, la posibilidad de seguir adelante.