"Nosotros le damos a nuestros productos un significado global, de modo que ofrecemos un mismo tipo de diseño y también una misma transformación del diseño", anunció el presidente de Ford en Alemania, Bernhard Matthes.
"Eso significa que los automóviles que vendemos en Asia tienen los mismos elementos de diseño que en Europa y América", agregó el ejecutivo.
Asimismo, señaló que una óptica diferente en diferentes regiones "sólo ha conseguido crear confusión en el pasado entre los clientes". "La marca es conocida", declaró Matthes, "pero cuando se miran las cifras de ventas de Ford se ve que la marca tiene peores datos que otros fabricantes".
El grupo empresarial calcula para su negocio europeo pérdidas de más de 1.000 millones de dólares para este año.
Como consecuencia de estos malos resultados, Ford ha decidido reducir su plantel laboral en todas sus fábricas del Viejo Continente, y disminuir la jornada de trabajo en su planta de la ciudad alemana de Colonia.
El fortalecimiento de la compañía con sede en Detroit forma parte de su programa de tres pilares, según Matthes, junto con los recortes y el desarrollo de nuevos productos. Y además del diseño homogéneo en todo el mundo, Ford también apuesta por nuevas tecnologías para los automóviles.