En caso de que Volkswagen haya violado la Ley Federal de Protección al Consumidor por la venta irregular de vehículos a diésel en México, la automotriz alemana será sancionada, advirtió la titular de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), Lorena Martínez Rodríguez.
En conferencia de prensa, la funcionaria explicó que la sanción podría ser de alrededor de tres millones 700 mil pesos por cada operación comercial.
“Una sanción que básicamente procede de manera directa, partiendo de un principio claro, en el supuesto de que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) ratifique que los automóviles no cumplen con las normas y por tanto significa que vendieron un automóvil engañando al consumidor con características y condiciones que no tiene", resaltó.
Ello, explicó, se establece claramente como una violación al Artículo Séptimo de la ley "y por tanto proceden de manera directa las sanciones", aunque hasta ahora la Profeco no ha recibido ninguna queja, la cual puede ser por publicidad engañosa o simple y por haber vendido un producto distinto al que se ofreció al consumidor.
Martínez Rodríguez destacó que las sanciones proceden de manera individual o colectiva. En este caso, detalló, sería la segunda el camino más recomendable para proteger a unos 32 mil consumidores que compraron este tipo de vehículos en México.
"Lo podemos hacer con sólo 30 quejas y de ahí buscar la protección de los 32 mil consumidores", explicó la funcionaria.
Asimismo, aclaró que independientemente de que la empresa repare el daño, las denuncias "sí proceden", porque "una violación a la ley se persigue, independientemente de si hay o no conciliación".
El subprocurador de Verificación y Vigilancia de la Profeco, Salvador Farias Higareda, refirió que el subsecretario de Economía, Rogelio Garza, y funcionarios de la Profepa ya se reunieron con representantes de Volkswagen México, y la compañía se comprometió a ofrecer la información necesaria para el dictamen.
Aclaró que se espera que la Profepa emita su dictamen lo más pronto posible, y a partir de ese eso vendrán las consecuencias aunque, recordó, las disposiciones y normas de emisiones de contaminantes son diferentes en Estados Unidos y México.
"Se supone que la tecnología que se usó en los vehículos mexicanos es la tecnología europea y no la que se envió a Estados Unidos", aclaró.
Por lo pronto, resaltó que para dar certeza la Profeco ya envió un oficio a los gobiernos de los estados del país para que se les otorgue la información con los vehículos de motor a diésel en sus registros.
"De esta manera vamos a saber quiénes son las personas que tienen estos vehículos y cómo les podemos servir en la Profeco", concluyó.