El gobernador, Miguel Barbosa, aceptó la posibilidad de que su administración no termine de descubrir la corrupción cometida por sus antecesores, debido a la cantidad de irregularidades que, hasta ahora, ha hallado.
“Hay corrupción en todos lados, lo peor que puedo pensar es que no nos dé tiempo de descubrir toda la maldita corrupción que desarrollaron en los gobiernos pasados”.
Aceptó que algunos casos ya están prescritos, tanto en sus responsabilidades administrativas y penales, además de que los exfuncionarios se llevaron información.
“Fue un verdadero abuso, el deterioro de la vida pública en Puebla fue mayor porque cuando alguien se corrompe arriba, permite que se corrompa todo. Donde abrimos cosas, encontramos corrupción”.
También fustigó a los voceros de otros partidos por querer volver al poder, a pesar de las anomalías en los gobiernos que encabezaron.
“Quién sabe si nos dé tiempo de descubrir toda la porquería que se desarrolló. Y ahí están los voceros de ese mismo partido, que quieren volver al poder, que ellos son buenos, aunque hayan sido parte de los mismos equipos”.
Este jueves, Miguel Barbosa confirmó que, a partir de una revelación del secretario de Salud, José Antonio Martínez García, realizada en un evento público, su gobierno investigará las irregularidades en la creación de una fallida unidad de hemodiálisis en el Hospital del Niño Poblano, durante el periodo de Rafael Moreno Valle Rosas.
“Es a partir de hoy cuando empezamos nosotros a hurgar, investigar, sacar elementos para poder definir la ruta que vamos a seguir en estos casos”.