El olor que emite un cuerpo humano en descomposición llevó a los vecinos del barrio de Santa Catarina, de la junta auxiliar de San Francisco Totimehuacán, a descubrir un violento crimen ocurrido en el interior de la casa ubicada en calle Libertad sin número, esquina con Ocote.
La propietaria de esa casa, Juana Adolfa López Rivera, de 40 años de edad, fue hallada sin vida en la sala de su casa en completo estado de putrefacción; tenía una herida de arma blanca en el cuello que deja suponer a los investigadores que esa fue la causa de su muerte.
La mujer, de acuerdo con reportes de Criminalística tendría unos 20 días de haber sido asesinada, su recámara se encontraba en completo desorden, lo que indica que fue en ese lugar donde se inicio la trifulca que terminó en su muerte.
El agente del Ministerio Público de Homicidios se presentó al lugar de los hechos para iniciar las diligencias del levantamiento de cadáver de Juana Adolfa López Riviera, quien vivía sola en esa casa y no tenía mucha relación con sus vecinos, por lo que estos no extrañaron su ausencia.
Los mismos vecinos dijeron que desde hace varios días habían notado un olor fétido salir de esa casa. El domingo 20 de febrero una de las hermanas llegó a visitar a Juana; estuvo tocando durante varios minutos, como nadie le hacia caso, aunado al fuerte olor a putrefacto, fue como decidió ingresar forzando la puerta por lo que descubrió el cuerpo sin vida de su consanguínea, dando aviso a la Policía municipal.
Al respecto del crimen el representante social dio entrada a la averiguación previa 021/2011/AEH, girando un oficio de investigación para elementos de la Policía Ministerial del Estado (PME).
