Pese a que la Procuraduría General de Justicia (PGJ) maneja con mucho hermetismo lo ocurrido en la casa ubicada en lote 17, manzana 16, de la calle Mario Benedetti; trascendió que el agente del Ministerio Público de Homicidios, Jorge Antonio Hernández Sucilla, acudió a levantar el cuerpo de la desafortunada mujer que presentaba signos de descomposición.
Quien dio aviso de la muerte de la mujer no fue su pareja, sino familiares de ella, quienes fueron a verla a su casa y la encontraron sin vida y a su marido en estado de ebriedad, por lo que de entrada lo acusaron de darle malos tratos, a grado tal que presentaba artritis, que también pudo haber sido provocado porque durante muchos años trabajo como empleada doméstica.
El cuerpo de Ana María presentaba huellas de golpes. El representante social giró instrucciones para que fuera trasladado a las instalaciones del Servicio Médico Forense (Semefo), a fin de que el médico legista se encargue de la práctica de la necropsia, para que se conozcan más las causas de su muerte.