Tanto la Procuraduría General de Justicia de Puebla (PGJP) como la de Morelos (PGJM) se “lavaron las manos” acerca de si los siete adultos desaparecidos, oriundos del Distrito Federal, quedaron en esa ciudad de Morelos o en Puebla, donde fueron abandonados seis menores —sus hijos— a bordo de un vehículo Peugeot, tras realizar comentarios donde se deslindan de que en sus estados puedan estar los desaparecidos.
La PGJ de Puebla, antes de la medianoche del miércoles 17 de julio, envió un comunicado donde el encabezado dice: “El Gobierno de Puebla brindó apoyo y protección a 7 menores que viajaban con adultos de los que se rastrea su paradero con otros estados”, mientras que la de Morelos informó que “están a la espera de que sus homólogos del Distrito Federal y Puebla y las compañías telefónicas de celulares para avanzar en la investigación que hasta el momento se encuentra sin una línea de dónde desaparecieron los adultos en Oaxtepec y qué pasó con las personas que los invitaron a Morelos”.
De acuerdo con los informes de la Procuraduría poblana, los niños —entre los que se encuentra una adolescente de 13 años de edad— fueron hallados en un vehículo particular sobre el bulevar Norte y calle La Pedrera, en Puebla capital, sin que estuvieran acompañados de un adulto, por lo que les dieron alojamiento y quedaron bajo custodia el DIF estatal, en tanto en la Agencia Especializada en Delitos Sexuales y Violencia Intrafamiliar se inició una constancia de hechos.
En el boletín no se precisa si los padres de estos niños fueron “levantados”, sólo se dice “que de acuerdo a información preliminar, los menores salieron del Distrito Federal y acudieron a un balneario en el Estado de Morelos en compañía de algunos familiares sin que se supiera algo de ellos, toda vez que las personas desconocidas —quienes trasladaron a los menores a Puebla— les argumentaron que los llevarían a ver a sus seres queridos y finalmente los abandonaron en Puebla, en el lugar que se les ubicó ilesos”.
La PGJM desconoce si los desaparecidos fueron levantados en Morelos
Una nota del periódico Excélsior, fechada como “Cuernavaca 18 de Julio”, resalta la declaración de Rolando Bond López, subprocurador de Investigaciones Especiales, donde dice que “no hay precisión del domicilio que ubique precisamente su llegada a Morelos, se denuncia en el Distrito Federal y aparecen en Puebla, la persona imputada tiene antecedentes penales a nuestro favor, para la investigación tenemos a la testigo, una niña menor de 13 años, que ella también fue sujeta de esta privación de la libertad”.
Adriana Pineda Fernández, subprocuradora general, aclaró que “por la ubicación del domicilio en el estado de Morelos, también se han hecho peticiones para que las diferentes compañías telefónicas de los aparatos que traían las víctimas nos puedan georeferenciar la ubicación exacta de donde transitaron ellos ese día y en las horas que nosotros estamos estableciendo que ocurrieron los hechos.
”Nosotros, como pienso yo, como un estado de tránsito en este evento, estamos esperando la colaboración formal, cierta, documentada, legal, certificada por la autoridad ministerial de estos estados, estamos haciendo nuestro trabajo como podemos, trajimos a la niña de 13 años que fue víctima”, aseveró Pineda Fernández.
