En medio de un absoluto hermetismo, la Procuraduría General de Justicia (PGJ) le sigue la pista a un sujeto apodado “El Beto” o “El Tío” o “La Abeja”, quien no sólo podría ser el autor material del secuestro del empresario poblano Héctor Ortiz Rivera, quien fue asesinado a martillazos en un departamento de la unidad Loma Bella de Puebla y quien fue llevado hasta San Luis Potosí, sino que además seria el encargado de la casa de seguridad ubicada en la ciudad de Atlixco, donde dos presuntos cabezas de bandas organizadas del crimen se encontraban privador de su libertad.
Tras la consignación de los detenidos: Enrique Caballero Medina “El Henry”, de 32 años de edad, originario del Distrito Federal y vecino de la ciudad de Puebla; Omayra Yuridia González Bustamante “La Yuri”, de 21 años de edad, y María de la Cruz Bustamante Vargas “La Cruz”, de 53 años de edad, trascendió que los tres tenían un jefe inmediato que hasta el momento no ha sido detenido.
De acuerdo con las nuevas investigaciones del caso se dijo que los tres detenidos al parecer se dedicaban a la industria del secuestro y que recibieron órdenes del “Beto” de que secuestraran al empresario, pero al momento de que lo golpearon se les “pasó la mano” y le provocaron la muerte.
Por miedo a lo que pudiera decirles su jefe fue como se llevaron el cuerpo sin vida del empresario a San Luis; lo llevaban en la parte trasera de la camioneta Land Rover, porque pensaban desaparecerlo en ese lugar mientras buscaban una excusa para que no pudieran ser castigados por su “descuido”.
Se dijo que este mismo sujeto sería el jefe del hombre que murió en una casa de seguridad ubicada en la ciudad de Atlixco, a manos de dos sujetos que podrían pertenecer al crimen organizado y quienes estaban secuestrados.
En dicha casa fueron hallados cartuchos de diversos calibres, chalecos antibalas, armas de fuego largas y cortas, además de granadas de fragmentación.