Los restos de otro descuartizado fueron hallados en la cajuela de un taxi, abandonado a un costado de la carretera a Azumiatla, a la altura de la comunidad de San José del Rincón.
La Procuraduría General de Justicia (PGJ) como ha ocurrido en este tipo de casos, ocultó la información del hombre del que hasta el momento se desconoce su identidad, aunque no se descarta que pueda ser el conductor o el propietario del vehículo de alquiler.
La mañana de este domingo el agente del Ministerio Público de Homicidios, peritos en criminalística y medicina forense, así como elementos de la Policía Ministerial del Estado (PME), acudieron al lugar donde se encontraban los restos humanos para iniciar las primeras investigaciones, siendo trasladados estos al Servicio Médico Forense (Semefo), para continuar con las indagatorias.
Los restos humanos se encontraron en la cajuela del taxi Tsuru, placas 7855-SSG, mismo que fue asegurado para investigaciones posteriores, en tanto que solicitaron a la Secretaria del Transporte que informe quién es el propietario de esta unidad, de acuerdo a las placas y al número de folio que aparece.
Las primeras indagatorias revelaron que quienes llevaron el taxi hasta ese lugar lo empujaron para que se fuera a una especie de barranca y se detuviera con un árbol, luego se retiraron.
Ministeriales se entrevistaron con vecinos de la zona para saber si alguno de ellos pudo ver quiénes llevaron el taxi hasta ese lugar.
