Al estilo de las mafias de Estados Unidos después del levantamiento a la prohibición a la venta de licor, el lunes pasado en Quecholac ocurrió un ataque gangsteril ‎por la adjudicación completa de la construcción de la autopista Acatzingo-Esperanza, que dejó como saldo cuatro muertos, entre estos José Luis Beristain Alejandre, líder del Sindicato de los Trabajadores de Transporte de Material para la Construcción, adherido a la Confederación de Trabajadores de México (CTM), en Palmarito Tochapan.

Fotos que llegaron a Intolerancia Diario dan muestra de cómo fue perpetrado el homicidio de José Beristain, donde Javier Sánchez Cansino, líder del Sindicato de Transporte de Materiales, denominado Libertad, con sede en la colonia Casa Blanca, le disparó a quemarropa, luego otro le propinó golpes con un bate de beisbol en la cabeza, además de que le pasaron un camión encima.

Aun con estas lesiones, el hombre no murió en el lugar de los hechos, sino durante el traslado al Hospital General de Tecamachalco, de acuerdo con el expediente levantado por el agente del Ministerio Público de Tecamachalco.

Javier Sánchez Cansino, quien aparece en la foto ‎empuñando un arma de fuego en la mano derecha y con la izquierda ordenando que siguieran vapuleado a su víctima, habría sido invitado para que con personal de su sindicato ingresara a la construcción de una parte de la autopista que va a Orizaba, por Arturo Soto, quien es hermano del líder de la CTM en Puebla, Leobardo Soto, lo mismo que Rafael Carbarín, quien representa al mismo sindicato, pero desde Esperanza. 
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La obra de la autopista fue otorgada a una empresa de Fresnillo, Zacatecas y esta solicitó al Sindicato de Transportes de Materiales para la Construcción, que a nivel nacional representa Juan Carlos Flores Flores, para que designara a quienes se iban a hacer cargo del traslado de materiales. 

Para tal fin, en territorio poblano quedaron los sindicatos de transportistas de la CTM de las delegaciones de ‎Palmarito, Quecholac, Tecamachalco, Palmar de Bravo, además de Puebla y de la FROC CROC, representada por un hombre de apellido Varillas, de la delegación de Esperanza.

El sindicato Libertad de Trabajadores, que en Esperanza tiene como líder a Rafael Carbarín, decidió apoderarse de la obra completa y desconocer a las seis agrupaciones sindicales, llevando a golpeadores, al parecer "cholos".

Estos hombres llegaron armados y cuando se encontraban en el banco de materiales para la construcción, conocido como Madero, en el municipio de Quecholac, iniciaron "la carnicería".

El primero en ser atacado fue el líder de la CTM en Palmarito, José Luis Beristain Alejandre, además de su hijo Luis Felipe Beristain Jiménez.

Los agresores al parecer estaban drogados y al detonar sus armas se confundieron y les dispararon a dos de su bando, a quienes dejaron lesionados de gravedad.

Tras lo ocurrido, la obra de la autopista fue detenida, los agredidos fueron internados en el Hospital General, donde se dijo que los cuatro fallecieron.

La Procuraduría General de Justicia (PGJ), a través del Ministerio Público de Tecamachalco, se encarga de las investigaciones correspondientes.