Por depresión, una menor de 17 años de edad se quitó la vida tras ingerir pastillas de fósforo de aluminio, pese a que su madre –al darse cuenta de lo ocurrido– la trasladó de emergencia al Hospital General de Izúcar de Matamoros, donde los médicos no pudieron hacer algo para salvarla.
A las 09:30 horas del miércoles, personal de la Fiscalía Regional del Estado acudió al nosocomio para realizar las diligencias del levantamiento de cadáver de Maricela A.G.
Los restos mortales de la joven fueron trasladados al Anfiteatro del Panteón Municipal, para que el médico legista se hiciera cargo de la práctica de la necropsia de ley.
En este sentido, la madre de la adolescente dijo que por la mañana del miércoles vio a su hija vomitando, y al cuestionarla por lo que le pasaba respondió que había ingerido pastillas de fósforo de aluminio.
Fue entonces que la trasladó al hospital, pero el personal no pudo evitar que falleciera. El caso fue radicado en la Carpeta de Investigación 456/2017/IZÚCAR.
