De manera sorpresiva la Policía Estatal Preventiva (PEP), de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), además de representantes de la Comisión de los Derechos Humanos (CDH), realizaron una revisión a diversos puntos del Centro de Reinserción Social (Cereso), de San Miguel.

La intención del operativo, además del aseguramiento de celulares, drogas y puntas, fue revisar la situación de las mujeres privadas de su libertad (PPL), de las que se decía eran obligadas a ejercer la prostitución, lo que resultó ser falso.

Durante la inspección fueron asegurados diversos envoltorios que contenían sustancias con las características de las drogas conocidas como marihuana, cocaína y cristal, así como un recipiente con licor, 14 teléfonos celulares, cuatro chips para teléfono, 15 cargadores, 24 pipas hechizas y nueve puntas.

Las PPL que fueron entrevistadas por personal de la CDH, dijeron no estar siendo obligadas a ejercer actos de prostitución, sino que las que llegan a tener alguna relación son internas e internos, ya que las visitas fuera del penal, por la pandemia están suspendidas.

Los dormitorios objeto de revisión fueron el  N y el C, además de VÍ y la sección femenina.