Mientras la mayoría de la población busca bajar de peso, una mujer se propuso ser la persona más gorda del mundo.
Susanne Eman de 32 años, originaria de Arizona, Estados Unidos, ingiere al menos 20,000 calorías por día y tiene como objetivo pesar 725 kg para fin de año.

La madre soltera de dos niños, cree que ya sobrepasó a Donna Simpson de Nueva Jersey que pesa 273 kg, y que de igual forma, busca rodar por la Tierra.

Además, Susanne ha creado su propio club de fans 'Mujeres gordas hermosas de gran tamaño' (SSBBWs por sus siglas en inglés) y planea incrementar su dieta para subir de peso.

"Me encantaría  alcanzar una tonelada, el que posee el récord actual pesa 725 kg, así que al menos tengo que llegar a esa cifra" asegura la robusta mujer.

Eman visita el supermercado una vez por mes con sus dos hijos y pasan, aproximadamente, ocho horas llenando los 6 carritos.

Lo más sorprendente es que ella piensa que, a pesar de todo, puede mantenerse saludable. "Entre más grande estoy, mejor me siento. Ahora me veo confidente y sexy, ¿por qué no romper barreras y ver qué tan gorda me pongo sin dejar de estar sana?"—lo único que va a romper son muchas sillas.

Esta extraña meta, surgió porque la mujer no podía dejar de ganar peso 'naturalmente' "Empecé a notar que entre más gorda me ponía, los hombres se fijaban más en mi" asegura.

Su doctor, Patrick Flite, le ha advertido que su peligroso experimento podría matarla "Ella está jugando a la ruleta rusa con su vida, existen varios casos documentados de las complicaciones que conlleva el sobrepeso".

A pesar de todo, ella continúa feliz, haciéndose chequeos constantes y practicando rutinas simples de ejercicios.

"El mensaje que quiero transmitir, es que las personas deben aceptar a los demás por lo que son" concluye.