En diálogo con Notimex, la también presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (Fech) dijo que “el estudiantado está jugando hoy en día un rol de detonante social en Chile”.
“Lo que vivimos hoy es la síntesis de muchos descontentos, no solamente en el ámbito educacional en general”, afirmó la alumna de Geografía de 23 años, quien se ha convertida en el “rostro” del movimiento en pos de una profunda reforma educacional.
Vallejo, quien milita desde los 19 años en el Partido Comunista (PC), explicó que “el descontento es en el ámbito de todos los derechos que nos han sido arrebatados a partir de la dictadura (1973-1990) y de la imposición del modelo neoliberal en el país”.
“Eso se constata en las protestas por la construcción de la megacentral hidroeléctrica de Hidroaysén, la defensa del medioambiente, el reclamo de las regiones o de las minorías sexuales”, añadió la dirigente universitaria.
A juicio de Vallejo, “el reclamo que brota (en la sociedad) es contra el actual modelo de desarrollo, donde las ganancias se las llevan unos pocos, el mismo grupo de poderosos, tanto nacionales como extranjeros”.
“En cambio, las externalidades negativas, los costos, los pagamos todos los chilenos”, aseveró la líder de la Fech, al celebrar que “hoy día se está entendiendo un poco esto y se está visualizando” en el resto de la ciudadanía.
Sostuvo, además, que “se ha dado un contexto que ha permitido la protesta, obviamente con un gobierno de derecha, pero también de mucho aguantar, de mucho conformismo, y hoy día es como ‘¡ya basta!’”.
En opinión de Vallejo, el movimiento estudiantil ha podido capitalizar este fenómeno de descontento social y por ello las federaciones tienen vínculos con grupos ambientalistas y otras organizaciones políticas, sociales y sindicales.
“Hoy día yo creo que se está dando inicio de alguna manera a un proceso que va a comenzar a capitalizar con más fuerza, que va a tener posición política y que así tenemos que trabajar para que así sea”, subrayó la dirigenta.
Afirmó que “tenemos que trabajar para fortalecer (el movimiento) como organización y con visión política en el sentido de que tiene que, en algún momento también, plantear una alternativa que dispute el poder”.
“Esa es la estrategia que hoy día tenemos que pensar en el movimiento estudiantil. Nosotros obviamente lideramos de alguna u otra manera un grupo bastante importante (estudiantes, académicos, funcionarios)”, apuntó.
Advirtió, sin embargo, que “esto tiene que vincularse con otros sectores, con otros ámbitos, porque tiene que haber un cambio estructural de este sistema”.
“En lo inmediato, nosotros podemos sacar algunos avances en términos de la educación superior, pero no vamos a lograr los avances más profundos con un gobierno de derecha, con un modelo que se ha arraigado durante más de 30 años en nuestro país”, apuntó.
Sostuvo, por ello, que “lo que tiene que haber es un proceso continuo de construcción, que se ha instalado, y tenemos que tener la altura de miras necesaria y la visión política para poder empezar a articular mayor fuerza y poder”.
“Hay que generar un consenso ciudadano, político y social. Hay que construir una alternativa, no solamente una oposición, sino que una alternativa real para nuestro país”, concluyó Vallejo.