En una carta a la opinión pública, firmada por las organizaciones Europa Laica, Redes Cristianas y la Asociación Madrileña de Librepensadores, condenaron los recientes incidentes en torno a la manifestación y anunciaron que tomarán medidas jurídicas.
El miércoles se realizó la marcha “Con mis impuestos, al Papa cero” para protestar por la forma (con recursos públicos) en la que el Papa visita Madrid para participar en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) que comenzó el martes y termina el próximo lunes, y a la que Pérez Bautista amenazó.
El mexicano, estudiante del Instituto de Química Orgánica General del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, fue detenido el martes de esta semana y fue puesto en libertad provisional este jueves bajo cargos de amenazas a un colectivo social.
Ante ello, las organizaciones convocantes de la manifestación afirmaron este viernes que se apoyará a los grupos afines que se van a presentar como “acusación popular” en el caso de Pérez Bautista, joven católico que estaba inscrito como voluntario en la JMJ 2011.
Recordaron que el mexicano, de 24 años de edad, presuntamente pretendía atacar con gases a la manifestación. La Audiencia Nacional lo puso en libertad con cargos.
De acuerdo con las diligencias previas 147/2011 del Juzgado Central Número Dos de la Audiencia Nacional, Pérez Bautista emitió opiniones en el portal digital “La Voz Libre” en los que anunció que mataría “a maricones” de la protesta contra el Papa.
En sus comentarios habló sobre la preparación de componentes químicos con los cuales atentar “en nombre de Dios” contra los manifestantes, al tiempo que agradecía a quienes se habían interesado en reclutarse para participar.
Las organizaciones firmantes del documento también anunciaron medidas jurídicas por los incidentes de violencia que se produjeron tras la manifestación en la Puerta del Sol de Madrid y apuntaron a la falta de seguridad como una de las causas.
Asimismo, criticaron que hubo una deliberada ocupación de jóvenes de la JMJ de la plaza que hizo que se produjera tensión y que la acción de la policía fue permitirles a ellos seguir en el lugar y agredir a los manifestantes laicos.
Denunciaron que hay una complicidad de autoridades religiosas y políticas para descalificar por todos los medios a los laicos, cuya finalidad de manifestarse es criticar “las relaciones privilegiadas y confesionales entre el Estado español y la Iglesia católica”.