Luego de tirar dos o tres veces la pelota, el mandatario se acercó a la prensa para calificar de “morbosa, grosera e inhumana” la versión difundida el miércoles por el diario estadunidense El Nuevo Herald, de Miami, sobre una hospitalización urgente por insuficiencia renal.
“Aquí estoy (...) yo soy mi propia respuesta”, declaró Chávez en una rueda de prensa, la primera desde su regreso de Cuba hace una semana, donde se sometió a un cuarto ciclo de quimioterapia por el cáncer del que fue operado en junio.
Vestido con chamarra roja y gorra con los colores de la bandera venezolana, el líder de la Revolución Bolivariana bromeó en varias oportunidades sobre el artículo del diario estadunidense, al cual consideró como “toda una novela”.
Cuestionó la pregunta de un reportero sobre la clase de cáncer que tiene y dijo: “¿Qué quieren, que les saque aquí el tumor maligno que me extrajeron para mostrárselos?”.
“No los voy a complacer”, agregó Chávez, al desmentir que el cáncer que le fue diagnosticado fuera de colon, aunque dijo que recibió 40 puntadas a la altura de la panza y que afortunadamente el tumor del tamaño de una pelota de béisbol estaba “encapsulado”.
Atribuyó las versiones sobre su salud a sus adversarios políticos y dijo que los miembros de la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática “están más locos que la locura imperial” porque dicen que ya tienen ganadas las elecciones del 2012.
“Los estoy doblando, pero ellos dicen que ya ganaron”, indicó Chávez y denunció que existe un plan violento para desconocer los resultados de los comicios presidenciales. “Ni se les ocurra”, advirtió sobre el proceso, adelantado para el 7 de octubre del 2012.