El presidente de Honduras, Porfirio Lobo, anunció hoy la separación temporal de las autoridades penitenciarias para garantizar una investigación eficaz de las causas del incendio del penal de Comayagua que dejó más de 350 muertos.

"Haremos toda la investigación para determinar qué provocó esta lamentable e inaceptable tragedia, para sentar responsabilidades", dijo el mandatario, en cadena de radio y televisión, al anunciar la "suspensión de los cargos" para "garantizar un proceso investigativo de total transparencia".

Lobo sustituyó al director de Centros Penales, Danilo Orellana, por el subdirector, Abraham Figueroa, quien en declaraciones en Camayagua advirtió de la situación precaria en las 24 cárceles del país, que albergan a unos trece mil reos, cuando la capacidad es de menos de ocho mil.