Hugo Chávez dijo haber conversado con Bashar al Assad, quien le informó de las "reformas" que lleva a cabo en su país, sumido en una crisis desde marzo del año pasado que se cobró la vida de miles de personas.
 
"Me explicó con mucho detalle todas las reformas políticas que está haciendo, que ha venido haciendo: un referéndum, una nueva Constitución, una nueva ley de partidos políticos", dijo Chávez en una comunicación telefónica con el canal estatal de televisión.
 
"Y, sin embargo, fíjate -agregó-, continúa la presión del imperio yanqui y sus aliados tratando de derrocar por las armas al presidente".
 
El caudillo venezolano aseguró que llevaba varios días tratando de hablar con el sirio y que en la conversación, de poco más de media hora, le comentó además sobre su estado de salud.
 
En un comunicado sobre esa conversación, la Cancillería venezolana informó que "Al Assad aseguró a su homólogo que los próximos días serían escenario de nuevos avances en Siria".
 
"Los Jefes de Estado intercambiaron informaciones acerca de la situación política y de seguridad en Siria y en la región del Medio Oriente, especialmente sobre la manera exitosa como el régimen sirio ha contenido a las bandas terroristas armadas que atentan contra la paz y la tranquilidad del pueblo sirio", reza el texto.
 
Además, Chávez expresó "su pleno respaldo a la estabilidad de la gran República Árabe Siria, la cual siempre ha estado en el corazón de la lucha de los pueblos árabes por la soberanía y contra el imperialismo".
 
Los mandatarios destacaron "el papel positivo" de Rusia y China ante la coyuntura en la región, precisa el comunicado oficial.
 
"Al Assad sumó sus plegarias a las de tantos otros que acompañan a Hugo Chávez en su proceso de sanación y pleno restablecimiento", indicó la Cancillería en referencia al cáncer del que el venezolano fue operado el 26 de febrero, recurrencia del que fue intervenido hace diez meses en Cuba.
 
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, condenó una nueva jornada de represión en Siria, donde este viernes murieron al menos 64 personas, y advirtió a Damasco que el plazo acordado para el cese total de hostilidades "no es una excusa para seguir con las masacres".
 
Según datos de la ONU, desde el inicio de las protestas contra el régimen de Al Asad, a mediados de marzo de 2011, más de 9.000 personas perdieron la vida, más de 200.000 se desplazaron a otras zonas dentro del país y 30.000 se refugiaron en naciones cercanas, especialmente en Turquía.