“Seguiré haciendo todo el esfuerzo que pueda para conducirlos a ustedes a una gran victoria el 7 de octubre, para coronar una victoria perfecta, pero yo lo hago sobre todo porque yo sé que nos estamos jugando, ahora mismo, la vida de Venezuela”, indicó Chávez.
El jefe de Estado señaló que llegó a pensar en dejar el poder tras la segunda intervención quirúrgica a que fue sometido en La Habana, Cuba, para superar el cáncer que se le detectó en junio de 2011, pero ante el “peligro de la patria”, decidió “seguir en la lucha”.
“Cuando se juega la vida de la patria, qué importa la vida de un soldado, lo que importa es la vida de la patria, la vida del pueblo, la vida de la revolución, eso es lo que importa en verdad”, dijo en una reunión con dirigentes del Partido Socialista Unido de Venezuela.
“Las cosas por las que yo he tenido que pasar pudieran haber configurado un cuadro en el cual yo mismo hubiese decidido salir de (el Palacio presidencial de) Miraflores e irme a comandar una patrulla militar”, sostuvo.
Recalcó que “sobre todo con la segunda operación (en La Habana) en alguna noche en la soledad, decía: ‘bueno, pareciera que llegó la hora de buscar alguien que asuma la responsabilidad de seguir al frente de este esfuerzo revolucionario’”.
Reveló que llegó a pensar en ese opción y habló mucho al respecto con el ex presidente cubano Fidel Castro, en marzo de este año. Pero “me propuse hacer el esfuerzo, me aferré más como aferrado estoy a Cristo redentor y a la esperanza de seguir viviendo”, añadió.
“Y seis meses después aquí estoy, a un mes de las elecciones presidenciales”, aseveró el mandatario.
Chávez advirtió que la “burguesía” local pretende lanzar nuevas amenazas de cara a los comicios, pues “nos estamos enfrentando al imperio norteamericano y a poderosas fuerzas que se han reunido para lanzar y pretender agredir, una vez más, al pueblo venezolano”.
En ese sentido, denunció que el candidato presidencial opositor Henrique Capriles “no es político” y aseguró que su programa de gobierno es un “paquetazo neoliberal made in USA (hecho en Estados Unidos)”, con “lineamientos de destrucción nacional”.