Ante la negativa del presidente Barack Obama a atacar Irán —al menos antes de las elecciones del 6 de noviembre— el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, decidió cambiar de estrategia y dirigirse directamente a la opinión pública estadunidense, a la que sugirió la necesidad de elegir un mandatario que sea capaz de frenar a tiempo la amenaza nuclear del régimen islamista.
“Están a 6 o 7 meses de alcanzar su objetivo. Usted lo sabe, están en las últimas 20 yardas. Y no se les puede dejar que crucen la línea de gol. No podemos dejar que anoten un touchdown”, advirtió Netanyahu, usando un símil futbolístico, en una entrevista con la cadena estadunidense NBC.
“El mismo fanatismo”. El mandatario israelí aprovechó también el peligro de un Irán con armas nucleares con los ataques islamistas a las embajadas de EU en varios países árabes, tras la divulgación de una película donde se blasfema a Mahoma.
“Es el mismo fanatismo que se ve asaltando sus embajadas en la actualidad. ¿Desea que estos fanáticos lleguen a tener armas nucleares?”, preguntó el primer ministro israelí, en un intento de meter miedo a la opinión pública estadunidense.
“Líneas rojas”. Netanyahu se valió también de ejemplos históricos famosos para alertar sobre la necesidad de que EU sea liderado por un presidente con más dureza frente al peligro. “La exigencia del presidente John F. Kennedy para que los soviéticos retiraran sus misiles de Cuba “tal vez compró décadas de paz”, afirmó, y añadió: “Tal vez la guerra del Golfo podría haberse evitado” si EU hubiera dibujado antes una “línea roja”.
La semana pasada, Netanyahu exhortó a Obama y a otros líderes mundiales a que establezcan claramente en qué momento debe frenarse el programa nuclear iraní mediante un ataque militar conjunto.
Sin embargo, Obama insiste en que la inteligencia compartida entre Estados Unidos e Israel indica que Teherán aún no ha decidido si construirá una bomba, por lo que se inclina aún por la política de sanciones.