Un espectacular, pero nocivo fenómeno natural obligó a cerrar dos playas en Australia.
Una marea de algas rojas, conocidas como ‘chispa de mar’ (Noctiluca scintillans) está afectando a las costas de la Playa Clovelly y la Playa Bondi, localizadas en Sidney.
Las autoridades prohibieron a los bañistas internarse en aguas donde abunden las algas, pues su alto contenido en amoniaco puede ocasionar irritaciones cutáneas, entre otros efectos tóxicos.
Pese al riesgo, algunas personas han ignorado la orden de no entrar al mar.