Un piloto murió cuando intentó realizar hoy por la tarde un aterrizaje de emergencia con un helicóptero en la azotea de un rascacielos de Manhattan en Nueva York, informaron las autoridades.
El incidente ocurrió a alrededor de las 13:45 hora local en el 787 de la Séptima Avenida en Manhattan, un edificio de oficinas de más de 50 pisos en el corazón de la ciudad. El accidente provocó un incendio que fue controlado con rapidez, informó el Departamento de Bomberos de la ciudad.
Los servicios de emergencia llegaron en masa al lugar y cerraron varias calles adyacentes.
Las personas que trabajan en el edificio indicaron a los medios que sintieron cómo se sacudió el edificio cuando el helicóptero se estrelló y que posteriormente fueron evacuados.
El presidente Donald Trump dijo en Twitter una hora después de los hechos que se le informó del incidente y dio las gracias a los servicios de emergencia por su "fenomenal labor".
La secretaria del gobernador del estado de Nueva York Andrew Cuomo, Melissa DeRosa, dijo en Twitter que el presidente Trump llamó al gobernador para preguntar por el accidente y para "ofrecer toda la asistencia necesaria".
El alcalde de la ciudad de Nueva York, Bill de Blasio, dijo en una conferencia de prensa a alrededor de las 16:00 horas que no hay indicios de que el accidente haya sido un acto de terrorismo y que no había otro pasajero en el helicóptero, pero destacó que las conclusiones se basan en "información preliminar"
Aún no se sabe con certeza si el helicóptero tenía permiso para volar en la ciudad ni si la niebla y la lluvia contribuyeron al accidente.
La Administración Federal de Aviación confirmó que el helicóptero siniestrado es un Agusta A109E y que la Junta Nacional para la Seguridad en el Transporte se hará cargo de la investigación.
Con información de Xinhua.