El presidente del gobierno español en funciones, Pedro Sánchez, aseguró hoy que no descartaba "ningún escenario" en Cataluña tras los altercados ocurridos a raíz de las protestas contra las sentencias a los líderes independentistas.
Después de reunirse con líderes de los principales partidos políticos del país, Sánchez manifestó que "el gobierno de España considera todos los escenarios y responderá con tres reglas: firmeza democrática, unidad de los partidos políticos y proporcionalidad en la respuesta".
El presidente en funciones reconoció la labor de las fuerzas de seguridad y condenó de manera firme el uso de la violencia para "amedrentar a los ciudadanos" y "quebrar la convivencia en Cataluña".
Las reuniones fueron convocadas después del segundo día de disturbios en protesta por las condenas de entre 13 y 9 años dictadas el lunes, 14 de octubre, a líderes independentistas catalanes por su papel en el referéndum celebrado el 1 de octubre de 2017.
Dicho referéndum fue declarado ilegal por el Tribunal Constitucional (TC) español.
Sánchez publicó este miércoles un mensaje en Twitter expresando su "condena firme y categórica de la violencia que busca romper la convivencia en Cataluña" y su "determinación" de "garantizar la seguridad, con firmeza, proporcionalidad y unidad".
El ministro del Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska, resaltó en una entrevista en la televisión catalana (TV3) que una gran mayoría de la ciudadanía catalana se había manifestado "de manera pacífica" y señaló la existencia de "una minoría concreta" que ponía en entredicho las manifestaciones pacíficas del resto.
Oriol Junqueras, vicepresidente del gobierno catalán cuando se celebró el referéndum en 2017, recibió una sentencia de 13 años por sedición y malversación y pidió hoy el fin de la violencia, diciendo que "no nos representa".
La presidenta del Congreso de los Diputados en funciones, Meritxell Batet, descartó que el gobierno español aplique el artículo 155 de la Constitución española que limitaría las competencias de la autonomía de Cataluña, o la Ley de Seguridad Nacional, que permitiría el control de las fuerzas de seguridad en la región por parte del Estado.
Con información de Xinhua.
