Varios países europeos ya han prohibido el tráfico aéreo con Reino Unido para evitar la propagación de una nueva cepa de coronavirus que sería hasta 70% más infecciosa, según informaron autoridades británicas.

El Instituto Nacional Neerlandés de Salud Pública y Medio Ambiente (RIVM) advirtió al gobierno que el riesgo de que la nueva cepa del virus se introduzca en Países Bajos debe minimizarse tanto como sea posible mediante la restricción de viajar desde Reino Unido. La prohibición permanecerá vigente hasta el 1 de enero de 2021.

"Se cree que esta cepa del virus se propaga con mayor facilidad y rapidez y también es más difícil de detectar", dijo el gobierno neerlandés en un comunicado de prensa. "La toma de muestras de un caso en Países Bajos a principios de diciembre reveló la misma cepa del virus que se observó en Reino Unido. Después de los últimos informes de Reino Unido, este caso está siendo investigado más a fondo".

También, Italia El Ministerio de Asuntos Exteriores anunció hoy que el país prohibirá temporalmente los vuelos entre Italia y Reino Unido, sumándose a Bélgica y Países Bajos en la drástica acción.

"Como gobierno, tenemos el deber de proteger a los italianos y por esta razón, después de haber advertido al gobierno británico, el Ministerio de Salud firmará una disposición para la suspensión de vuelos con Reino Unido. Nuestra prioridad es proteger a Italia y a nuestros compatriotas", escribió el ministro de Relaciones Exteriores italiano, Luigi Di Maio.

La prohibición belga también incluye a las conexiones de tren: Bruselas (junto con París) es una de las dos ciudades de Europa continental donde la red Eurostar se conecta con Londres.

Asimismo, el Gobierno de Bulgaria anunció que suspenderá los vuelos con el Reino Unido hasta el 31 de enero de 2021.

Irlanda decidió cerrar temporalmente el tráfico aéreo con el país y la misma medida fue adoptada por las autoridades de Estonia, Lituania y Suecia, mientras que Francia suspendió los vuelos por un plazo de 48 horas.

Las autoridades de Israel, a su vez, prohibieron la entrada a todos los extranjeros que lleguen no solo desde el Reino Unido, sino de Sudáfrica y Dinamarca. Al mismo tiempo, los ciudadanos israelíes que regresen desde estos países se verán obligados a aislarse en unos establecimientos especiales, mientras que aquellos que lo hagan desde otros Estados pueden hacerlo en casa.

Por su parte, Turquía suspendió vuelos con el Reino Unido, Dinamarca y los Países Bajos, mientras que Suiza lo propio con el Reino Unido y Sudáfrica.

Para combatir el alarmante aumento de infecciones vinculadas a la nueva cepa, el primer ministro británico, Boris Johnson, anunció el sábado nuevas restricciones más estrictas para Londres, el sudeste y de Inglaterra.

Las medidas incluyen el cierre de tiendas, gimnasios y lugares de entretenimiento no esenciales, restricciones de viaje y el aviso urgente de no recibir visitas en casa.

Con información de Xinhua y RT.