El nuevo embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, indicó que Washington ha solicitado al gobierno mexicano permitir que sus agentes, entre ellos de la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA por sus siglas en inglés), operen en México.

El año pasado, México suspendió la inmunidad penal de los agentes extranjeros e impuso límites estrictos a sus contactos con sus homólogos mexicanos. Los analistas señalan que eso inevitablemente afecta la capacidad de la DEA de colectar datos de inteligencia sobre los cárteles de drogas en el país.

Dado que algunos agentes de la DEA de antemano se encuentran en México, parece que la solicitud estadounidense es para que se permita el ingreso de más agentes o para que aquellos que ya están en México puedan operar más libremente.

Estados Unidos se ha visto inundado por fentanilo que es producido mayormente en México usando como precursor substancias químicas provenientes de China. Salazar indicó que México se ha comprometido a combatir los cárteles de drogas bajo el nuevo acuerdo bilateral de seguridad Entendimiento Bicentenario anunciado el viernes para remplazar la Iniciativa Mérida

“Nosotros vamos a recibir cooperación del gobierno mexicano, que fue acordada ayer, para asegurarnos de que los recursos del orden público y la seguridad que tenemos funcionando aquí en colaboración con las autoridades mexicanas tienen la capacidad para hacerlo”, dijo Salazar en su primera conferencia de prensa desde su arribo a la capital mexicana en septiembre.

Salazar habló además de la necesidad de “una respuesta regional” a otra preocupación mayor de Estados Unidos: las decenas de miles de migrantes —muchos de ellos haitianos— que están en México o encaminados a México desde Sudamérica.

Con información de AP.