El presidente ucraniano Volodimir Zelensky anunció este lunes el inicio de una nueva serie de intercambios de prisioneros de guerra con Rusia, en lo que calificó como una operación que se desarrollará “en varias fases durante los próximos días”. Según detalló, entre los liberados se encuentran soldados heridos, gravemente heridos y combatientes menores de 25 años.
La operación marca el primer gesto humanitario concreto tras la segunda ronda de negociaciones de paz celebrada la semana pasada en Estambul. El Ministerio de Defensa ruso confirmó por su parte que el canje incluyó únicamente a jóvenes soldados, aunque no reveló el número exacto de liberados.
Zelensky compartió imágenes de los primeros combatientes recuperados por Ucrania, visiblemente emocionados y envueltos en banderas nacionales. Sin embargo, advirtió que Moscú no ha respetado plenamente los criterios acordados, al omitir la liberación de algunos soldados vulnerables.
El canje, que estuvo en duda durante el fin de semana, podría convertirse en el mayor intercambio de prisioneros desde el inicio de la guerra, hace tres años. Se estima que más de mil combatientes podrían ser liberados, aunque ninguna de las partes ha confirmado cifras oficiales.
Pese al avance humanitario, las negociaciones de paz siguen estancadas. Rusia exige la retirada ucraniana de todos los territorios ocupados y el reconocimiento de la anexión de cinco regiones, condiciones inaceptables para Kiev. En paralelo, Ucrania reclama un alto el fuego total y ha propuesto una cumbre trilateral con Vladimir Putin y Donald Trump.
Mientras tanto, los combates se intensifican. Este lunes, Ucrania denunció un ataque aéreo récord con 479 drones rusos, dirigido contra la región de Rivne. También se adjudicó un ataque contra una fábrica de componentes electrónicos en Rusia, supuestamente vinculada a la industria militar.
