En un contundente mensaje dirigido a los líderes del mundo, el papa León XIV alertó sobre el peligro que representan los actuales conflictos armados, especialmente por el uso de armamento cada vez más devastador.
Advirtió que “las potentes armas empleadas en la guerra actual amenazan con llevarnos a una barbarie superior a la de los tiempos pasados”.
Durante su declaración, el pontífice hizo un llamado a la conciencia global apelando a la dignidad humana y al respeto del derecho internacional.
“En nombre de la dignidad humana y del derecho internacional, repito a los responsables lo que decía el papa Francisco: ¡la guerra es siempre una derrota!”, subrayó.
León XIV también retomó las palabras del Papa Pío XII, pronunciadas en la antesala de la Segunda Guerra Mundial, al advertir: “Nada se pierde con la paz, todo puede perderse con la guerra”.
Esta cita, cargada de peso histórico, busca recordar a los líderes políticos y militares que la paz no es una opción débil, sino una exigencia moral y civilizatoria.
Aunque el Papa no mencionó directamente a ningún país o conflicto en particular, su declaración llega en un momento de alta tensión internacional, con múltiples frentes abiertos que involucran a potencias militares y víctimas civiles.
La Santa Sede, bajo el liderazgo de León XIV, ha mantenido una postura firme en defensa de la paz y el diálogo, instando a la comunidad internacional a evitar la escalada bélica y a buscar soluciones justas y duraderas a través de la diplomacia.