La funcionaria señaló que “actualmente en la institución habita una población de alto riesgo, ya que los de nuevo ingreso llegan con delitos como homicidios, extorsión, delincuencia organizada y otras infracciones que en antaño no se veían”.
De entre los más peligrosos destacan 50 jóvenes que ya cumplieron la mayoría de edad y aún siguen en la correccional recluidos, por lo que ya se busca enviarlos a otro lugar, “para que no contaminen a los otros”.
Asimismo, señaló que existe siempre un riesgo latente de motín o de intento de fuga, aunque al momento aseguró que no hay indicios de violencia ahí dentro.
Por ello, señaló que se presentó una iniciativa ante el Congreso de Chihuahua para que los internos que cumplan su mayoría de edad sean trasladados a un reclusorio para adultos, sin que al momento se tenga una respuesta de parte de los legisladores.
Actualmente, la población de la institución es de 216 internos, de los cuales 20 son mujeres y 50 de estos ya son mayores de edad, que son los que representan “un foco rojo”, pues pueden reclutar a menores para los grupos criminales. (Notimex)