El portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, afirmó que la responsabilidad de anunciar las fechas y ciudades de México que visitará el Papa en marzo de 2012 recaerá en las autoridades eclesiásticas de aquel país.
En declaraciones, precisó que no está previsto para los próximos días algún comunicado de la sala de prensa de la Sede Apostólica sobre el viaje de Benedicto XVI a América Latina, incluyendo Cuba, aunque no descartó pronunciamientos de los obispos de esos países.
“Normalmente el procedimiento, o al menos así se ha actuado con los otros viajes, es que las fechas y detalles generales de las visitas apostólicas son comunicadas en el lugar y El Vaticano mucho después difunde el programa definitivo”, indicó.
Esta semana trascendió en México que el próximo domingo desde Roma se confirmaría la agenda del obispo de Roma, los lugares que visitará y las ceremonias que presidirá.
Al respecto Lombardi aclaró: “no me resulta, a menos que me informen de último momento, que tenga lugar una comunicación que tome la primera iniciativa desde aquí y que esté prevista para el 1 de enero”.
Otras fuentes consultadas aseguraron que la estancia del líder católico en tierras mexicanas se extendería del 23 al 26 de marzo y se desarrollaría en el estado de Guanajuato (centro del país) con actividades en las localidades de León, Silao y la capital.
Agregaron que Joseph Ratzinger llegaría la tarde del viernes 23 de marzo y, tras una ceremonia de bienvenida, descansaría todo el sábado 24 salvo por una visita de cortesía al presidente de la República, Felipe Calderón Hinojosa, en la Casa del Conde Rul de la ciudad de Guanajuato.
Durante su estancia se hospedaría en la residencia religiosa de Miraflores y el domingo 25 celebraría una misa, ante más de 500 mil personas, en el Parque Guanajuato Bicentenario de Silao. En ese mismo lugar se reuniría con obispos latinoamericanos.