De acuerdo con datos de la Dirección de Protección Civil Municipal hasta un 20 por ciento se incrementan los accidentes en el hogar que le pueden costar la vida a los menores o dejar lesiones de por vida.

Quemaduras de tercer grado por agua hirviendo, descargas eléctricas, ingesta de sustancias tóxicas, caída de niños en escaleras y techos que dejan fracturas, así como ahogamientos en cisternas, son los incidentes que más se registran en este periodo vacacional.

El jefe del Departamento de Auxilio de la dependencia, Oliver Torija Morales admitió que hasta en un 20 por ciento se incrementan los accidentes en el hogar durante los periodos vacacionales, por lo que se recomienda a los padres de familia a estar atentos de estos problemas a partir del próximo viernes cuando inicia este periodo.

Indicó que los principales accidentes en los niños durante este periodo de descanso se refieren a quemaduras graves por agua hirviendo, consumo de sustancias tóxicas, fracturas ocasionadas por caídas en las casas y en casos más graves la muerte de menores de edad por ahogamiento en cisternas.

Torija Morales aseguró que este incremento en accidentes en niños de los 2 a los 12 años se debe al descuido de los padres de familia que por estar haciendo otro tipo de actividades no le dan prioridad a la vigilancia de los niños.

El funcionario municipal llamó a la población a extremar precauciones en los hogares con menores de edad para prevenir accidentes que pueden afectar al menor para toda su vida.

Ante ello, recomendó a los padres de familia tener muy bien vigilados a sus hijos, alejar del alcance de los niños sustancias tóxicas que pueden ser confundidos con refrescos, evitar que jueguen en lugares peligrosos como escaleras y alejarlos de cisternas de agua así como mantenerlas tapadas para evitar desgracias mayores.

El funcionario de Protección Civil Municipal estableció que para evitar accidentes, se deben tomar en cuenta diversas medidas de seguridad como: secar el piso después de bañarse para no tener resbalones que ocasionen golpes en la cabeza y el cuerpo; no vaciar líquidos de limpieza –como cloro y jabón- en botellas de refresco, pues esto llama la atención del niño y puede llegar a ingerirlo; y mantener tapados u ocupados los enchufes para que los infantes no sufran descargas eléctricas por meter los dedos o utensilios metálicos.

Expuso que los padres de familia, o las personas a cargo de los pequeños, deben identificar áreas específicas de la casa donde los menores no pueden tener acceso, como es la cocina; pero, a su vez, explicar a los infantes el por qué hay lugares restringidos para ellos debido al peligro que representan.

Además, dijo que una buena opción es la de mantener en actividades recreativas a los niños ya sea en casa o en algunos cursos de verano que son comunes en este periodo vacacional.