De aproximadamente mil hectáreas de bosque que había hace 40 años en la zona de La Calera, ya solo quedan  138 hectáreas producto de las constantes autorizaciones para la edificación de fraccionamientos en la zona.

Por ello, el ayuntamiento de Puebla inauguró el bio-parque la Calera, ubicado en el Módulo 2, Calle Pegaso S/N, de la Col. Galaxia la Calera.

A decir del Secretario del Medio Ambiente y Servicios Públicos Alejandro Fabre Bandini, este bio-parque tuvo una inversión de poco menos de 12 millones de pesos, en donde se instalaron andadores, un auditorio, juegos infantiles, gimnasios al aire libre, sanitarios ecológicos y un sistema reciclaje de agua, entre otros.

Fabre Bandini informó que este bio-parque además albergará la subdirección de áreas Naturales Protegidas y la jefatura de educación ambiental del ayuntamiento de Puebla.

Hay que destacar que este parque es el más grande del municipio con una extensión de 138 hectáreas de bosque, el cual beneficiará a vecinos de Jardines de la Montaña, Galaxia La Calera y Bosques de Chapultepec.

"Es el único bosque urbano de encino, algunos solamente se encuentra aquí, esta área natural protegida no había sido intervenida y ahora se rescató protegiendo y respetando siempre al bosque".

En este sentido el funcionario municipal mencionó que es el único pulmón de gran extensión que hay en la ciudad y que era importante preservar.

Aseguró que el único interés de la actual administración municipal es terminar con los abusos de algunas constructoras que sin ningún orden construyeron viviendas en lugares prohibidos o de muy mala calidad para los habitantes.

Fabre Bandini indicó que los constructores que pretenden solicitar más permisos de construcción de fraccionamientos en las inmediaciones de la Calera, ya han sido notificados de que en esta administración, ya no se darán más permisos.

Consideró que para frenar la desaparición de áreas verdes en el municipio, los gobiernos deberán establecer medidas reales en un ordenamiento territorial regulado que impida la aparición de conjuntos habitacionales y cambios de uso de suelo irregulares.

Con estas acciones, explicó el funcionario municipal se aumentará el número de hectáreas verdes de la capital, se logrará una reforestación de especies nuevas; no obstante, para lograr que esto se vuelva una realidad se requieren políticas sostenibles por lo menos durante los próximos nueve años para revertir el déficit de áreas verdes del municipio.