El domingo 4 de diciembre, siete policías de Vicente Guerrero golpearon a un comerciante, quien exige al gobierno estatal que preside Rafael Moreno Valle “tome cartas en el asunto” porque esta clase de situaciones —donde los elementos de seguridad actúan de forma violenta— ha ido en crecimiento en la actual administración.

Desde su regreso de Estados Unidos, Juan Ibáñez Cabanzo dijo que vive en la localidad de Antiguo Caporalco, Vicente Guerrero, se dedica a la venta de pizzas, tiene una panadería en Veracruz y los fines de semana vende en los espacios deportivos.

Refirió que el pasado domingo se dirigía a Aguatamantla cerca de las 14:30 horas los policías hicieron que se detuviera, pero de inmediato se dio cuenta que los elementos de Seguridad llevaban aliento alcohólico.

Al percatarse del estado de los policías no quiso descender de la unidad, motivando que uno de los elementos golpeara el parabrisas de su coche. Acto seguido dijo que descendió del vehículo para luego recibir una paliza, sin motivo alguno, de los uniformados.

Asimismo, el lesionado declaró que los elementos de seguridad lo despojaron de 50 mil pesos que llevaba en una mochila portátil, tarjetas de crédito y un celular.

“En un principio no supe a dónde me llevaban, pero logré reconocer que llegaron al límite entre Puebla y Veracruz en el paraje denominado Loma Guitarra donde volvieron a golpearme. Uno de ellos es originario de Coxcatepachapa, dos más de Rancho Nuevo, otros de Tilpatlán”, manifestó.

La amenaza

La respuesta de los uniformados fue empezar a amenazarlo y acusarlo de que pertenecía a la banda delictiva “Los Zetas”, por lo que —según ellos— lo había detenido. Regresaron a Vicente Guerrero donde lo bajaron y lo amenazaron con sembrarle un delito, le dijeron que iban a colocarle droga y a punta de pistola le hicieron jurar que no iba a decir que los conocía.

Agregó que uno de los elementos se llama Félix e incluso, cuando estuvieron en el municipio de Vicente Guerrero algunas personas lo reconocieron y quisieron ayudarlo; sin embargo, también fueron amenazados por los policías.

De acuerdo con el dictamen médico, el estado de salud de Juan Ibáñez Cabanzo es delicado, ya que presenta diversos traumatismos y contusiones, por lo que la víctima clama justicia al gobierno del estado y al presidente municipal para que eviten se sigan cometiendo esta clase de actos delictivos por parte del personal de Seguridad Pública.