Mujeres y niños llorando, hombres con la rabia contenida, así como los fiscales, mayordomos desconsolados recorrieron el templo del siglo XVII después que el agente del Ministerio Público y peritos en dactiloscopia confirmaron el robo de un antiguo lienzo con el pasaje de Las Animas del Purgatorio y 14 imágenes de bulto.
Entre las pérdidas destacan cuatro arcángeles y seis ángeles que estaban en los retablos -principal e izquierdo-, además de San Antonio de Padua con su respectivo Niño Dios, San Cristóbal y San Ignacio de Loyola.
La indignación creció al descubrir que el óleo fue rasgado con un objeto punzocortante para desmontarlo de su marco, y una vez abajo recortado nuevamente para llevarse únicamente la parte central.
Incrédulos, sin comprender los motivos del sacrilegio, cerca de 200 vecinos permanecieron bajo los intensos rayos del sol afuera del templo desde que fueron convocados con las campanas, a las 11 de la mañana, hasta casi las tres de la tarde, luego de recibir un informe sobre los hechos por parte del sacerdote Ezequiel Sánchez Mañón, y los encargados del templo: Melitón Quia Rosas, Emigdio Tiro Barrios y Roberto Cuanenemi.
Basados en las primeras investigaciones ministeriales, reunieron al pueblo en el atrio para informar que el despojo fue descubierto alrededor de las ocho de la mañana de este viernes, cuando abrieron las puertas para hacer el aseo y sacar las herramientas de trabajo de los albañiles que desde hace dos semanas pintan y reparan la fachada del templo, previo al cambio de fiscales, en diciembre.
Precisamente, una de las líneas de investigación se centra en tres albañiles que repentinamente dejaron de ir hace unos días. En total, son ocho peones y un maestro de obra que realizan las reparaciones en este lugar, mismo personal que se encarga de trabajos similares en otras iglesias de la arquidiócesis.
Aparentemente, los delincuentes treparon a la azotea con ayuda de los andamios que se encuentran frente a la fachada del edificio. Y, desde la azotea, se descolgaron por una ventana que no tiene seguros.
Elementos de la Comisaría Municipal de Seguridad Pública fueron los primeros en presentarse al lugar, alrededor de las diez de la mañana. Los mismos elementos trasladaron a los encargados del templo y al sacerdote a levantar la denuncia ante el Ministerio Público.
Tras asegurar el lugar y comenzar investigaciones, el coordinador de Ministerios Públicos en Cholula, Daniel Navarro, informó que canalizará el caso ante la Procuraduría General de la República porque se trata de un delito federal.
Exigen mayor vigilancia en Acuexcomac
Abrumados por el saqueo, los vecinos exigieron mayor vigilancia al gobierno municipal porque en la junta auxiliar carecen de elementos de policía.
Molestos, se quejaron de su presidente auxiliar Ignacio Carrillo Huinatl porque distrae sus obligaciones en asuntos personales. Como ejemplo, pusieron el hecho de que nunca se presentó para apoyar a la comunidad católica por el atraco.
Desde agosto, dijeron, pidieron mayor vigilancia para la feria patronal, pero ni el edil auxiliar ni el ayuntamiento les hicieron caso.