A unos días por concluir su periodo de gobierno 2011-2014, el primer regidor de Atzizintla, Arturo de Rosas Cuevas, destacó las obras que se han realizado en las comunidades y en la cabecera municipal, en beneficio de miles de habitantes; a su vez, resaltó que uno de los proyectos que recientemente logró atraer con apoyo del Gobierno Federal, a través de la Sedesol, es la construcción de 100 casas cuya inversión superó los 5 millones de pesos.

En entrevista para Intolerancia Diario, De Rosas Cuevas indicó que su gobierno aplicó al cien por ciento los recursos económicos que recibió para la ampliación de servicios básicos, electrificación y de infraestructura urbana; seguido de los apoyos que entregó la comuna a las escuelas, al sector vulnerable y, principalmente, al campo.

“La suma de esfuerzos es la clave para lograr el desarrollo y el progreso de nuestros pueblos. En estos tres años hemos dado un gran paso hacia ese camino, a fin de abatir el rezago y la marginación que aún lastiman a nuestras familias en esta región. En este sentido, quiero destacar el apoyo que obtuvimos por parte del Gobierno Federal, a través de Sedesol, para la entrega de 100 casas a igual número de familias”, expresó tras mencionar el logro de las gestiones que se realizaron ante el Gobierno Federal en el Congreso del estado y en las diferentes comisiones de vivienda que existen en la Cámara de Diputados.

Resaltó que estas acciones forman parte de la Cruzada contra el Hambre, en donde también se contó con el apoyo económico del fideicomiso Fondo Nacional de Habitaciones Populares (Fonhapo), en coordinación con el gobierno municipal de Atzizintla y el Fideicomiso Provivah.

“Agradezco el interés y los programas que ofrece el Gobierno Federal en apoyo a las familias más necesitadas; sin duda, la suma de esfuerzos hizo posible este logro que coadyuva a mejorar la calidad de vida de los que menos tienen”, insistió.

Mencionó que el Gobierno Federal, a través del programa de vivienda de Sedatu, ofrece estos subsidios a todos los municipios del país para familias que viven en condiciones de pobreza extrema, programa que ha tenido mucho éxito y que supo atraer el primer regidor de Atzizintla.

Finalmente, anunció que en las próximas semanas se llevará a cabo la inauguración de la obra conocida como Puente del Vado, cuya longitud es de 35 metros y tuvo una inversión que asciende a más de 8 millones de pesos, con apoyo del Gobierno Federal.

Apoyo al campo

Por su parte, el presidente de la asociación civil Fupoer, Enrique Ramírez Berriel, indicó que para que los campesinos sean empresarios rurales competitivos y que puedan tener la alternativa de exportar sus productos a otros países es necesario brindarles la capacitación y asesoría adecuada para que aprovechen al cien por ciento sus tierras.

“Estamos ante una situación en que, si queremos que nuestros campesinos y productores del sector agrario sean competitivos para que exporten lo que cosechan, es necesario enseñarles a cultivar productos orgánicos, a fertilizarlos con compostas, lubricompostas, lixiviados y caldos nutritivos; existe un amplia gama de estos productos.

”Hoy en día es importante enseñarles a nuestras familias que pueden producir lo que van a comer de manera saludable y que el excedente que cosechen lo puedan comercializar”.

Refirió que gracias al programa de Parcelas de Traspatio, que se ha implementado en Chalchicomula de Sesma, se atrajo el proyecto para la siembra del champiñón o setas, donde se ha enseñado a la gente que, además de que tienen ventajas altamente nutritivas, pueden comercializarlo con su gente.

“Hemos comprobado que una familia vive con la mitad de lo que cosecha en sus parcelas de traspatio y la otra mitad lo vende a su gente, asegurando parte de su alimentación y aparte un ingreso económico extraordinario en apoyo a su economía en el hogar”, destacó.

Finalmente, Ramírez Berriel expuso que una excelente iniciativa es que todas las autoridades municipales, estatales, federales, representantes de asociaciones civiles, líderes gremiales y todos los involucrados en el sector agrario unifiquen esfuerzos para lograr la producción de productos orgánicos, eliminando o prohibiendo en su totalidad el uso de herbicidas, insecticidas y otros productos químicos dañinos para el hombre.

“Debemos trabajar en equipo, unificando esfuerzos. La tarea no depende de algunos cuantos, es responsabilidad de todos, pues, al tiempo de garantizar una seguridad alimentaria en nuestro municipio, estado y país estamos consumiendo productos que son saludables. En ese sentido, debemos darle un nuevo enfoque al crecimiento del campo, pues sólo así podremos abatir la pobreza alimentaria y que las familias campesinas tengan una alternativa más próspera”.